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Cómo funciona y qué hace el equipo de delitos artísticos del FBI

Durante años operaron en gran medida inadvertidos, aunque el trabajo que hacían tenía el potencial de atrapar la imaginación del público.

Anillos del Super Bowl obtenidos fraudulentamente.

Devolución de pinturas robadas de iglesias de Perú.

Un hombre que reciclaba obras de arte baratas que compraba en internet para convertirlas en obras más caras elaborando hábilmente documentos de procedencia falsos.

Ahora, los agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) encargados de investigar delitos relacionados con el arte tienen un perfil más alto, en parte debido a un caso que el Equipo de Delitos Artísticos empezó a investigar el verano pasado.

El caso se hizo público con el allanamiento del Museo de Arte de Orlando, donde los agentes incautaron 25 obras que, según el museo, habían sido creadas por Jean-Michel Basquiat, un artista muy popular.Las obras de arte del Museo de Arte de Orlando fueron retiradas el año pasado después de que surgieron dudas sobre su autenticidad. La investigación del FBI está en curso. Crédito Willie J. Allen Jr./Orlando Sentinel, vía Associated Press / NYTLas obras de arte del Museo de Arte de Orlando fueron retiradas el año pasado después de que surgieron dudas sobre su autenticidad. La investigación del FBI está en curso

Sus obras suelen alcanzar precios millonarios en las subastas. Pero se habían planteado suficientes dudas sobre la historia de las obras de Orlando como para que los agentes empezaran a investigar su autenticidad.

La investigación continúa, pero el Equipo de Delitos Artísticos, que en los últimos años se ha ampliado a dos docenas de agentes repartidos por todo el país, se encuentra ahora en el centro de un escándalo artístico que concita atención en todo el mundo.

Hace poco, dos de los investigadores del equipo, la agente Elizabeth Rivas, que dirigió la unidad de delitos artísticos en Los Ángeles hasta su jubilación el año pasado, y el agente Allen Grove, que la sucedió, accedieron a responder las preguntas.

Se negaron a hacer comentarios sobre el caso Basquiat, planteando que la investigación está en curso. Sin embargo, hablaron sobre el origen y la finalidad del Equipo de Delitos Artísticos y sobre el creciente interés del público por él. El FBI ayudó a recuperar “La Virgen de Guadalupe”, a la izquierda, y “El Pentecostés”, que habían sido robados de iglesias en Perú y llevados a Estados Unidos. Crédito Oficina Federal de Investigaciones / NYTEl FBI ayudó a recuperar “La Virgen de Guadalupe”, a la izquierda, y “El Pentecostés”, que habían sido robados de iglesias en Perú y llevados a Estados Unidos

–¿Pueden empezar contándome el origen de este equipo?

–Rivas: En 2003, durante la guerra de Irak, se produjeron muchos saqueos en el Museo de Bagdad y otras áreas culturales de Bagdad. En aquel momento, la sede central del FBI vio la necesidad de organizar un equipo de agentes que pudiera ayudar a identificar las obras de arte y las antigüedades que estaban siendo robadas. Se esperaba que nosotros, el FBI, pudiéramos ayudar a devolver todo lo que hubiera sido robado y hubiera ingresado a este país.

Mucho antes de eso, los agentes del FBI habían trabajado en casos relacionados con obras de arte. Pero la formalización del equipo comenzó a partir de la guerra.

–¿Por qué es importante este trabajo?

–Grove: es obvio que mucho de lo que hacemos no necesariamente es una cuestión de vida o muerte, pero esas pinturas y objetos culturales y el tipo de objetos con que trabajamos duran mucho más que nuestro trabajo en esta organización… y, francamente, más que nuestra vida.

También es algo de lo que el FBI puede ocuparse de manera especial. Somos una organización nacional, pero también tenemos contactos globales en todo el gobierno. Y la cosa se complica, sobre todo con el comercio de antigüedades, que tiene tentáculos en todo tipo de países y en diversas entidades dudosas.La Unidad de Delitos Artísticos ha recibido más atención pública después del allanamiento en Orlando, en la que los agentes incautaron obras que, según el museo, habían sido creadas por Jean-Michel Basquia. Crédito Melanie Metz para The New York Times / NYTLa Unidad de Delitos Artísticos ha recibido más atención pública después del allanamiento en Orlando, en la que los agentes incautaron obras que, según el museo, habían sido creadas por Jean-Michel Basquia

–Parece haber un repunte del interés en este tipo de trabajo…

–Rivas: Hace tiempo que hacemos esto, sólo que se le está dando más publicidad. También hay mucha más actividad, en tanto el fraude y los robos aumentaron durante la pandemia. Y nuestros casos tardan un tiempo en llegar al nivel del procesamiento. Así que creo que muchos de los casos y el gran trabajo que estábamos haciendo están empezando a salir a la luz.

–Grove: He notado que una gran cantidad de documentales y podcasts ahora se dedican a casos de delitos con las obras de arte y las antigüedades. Esto habla del interés mundial que existe en algunos casos, pero también de las características únicas de muchos de ellos que los distinguen de un caso de drogas o un típico caso de guante blanco. Estos casos se diferencian de lo que solemos oír sobre las historias policiales: asesinos y horribles crímenes violentos. Siempre parecen estar protagonizados por personajes interesantes.

Los casos más resonantes

–Háblennos de algunos de los casos más interesantes.

–Rivas: Lo que puso mucho de esto en marcha fue probablemente el caso de la Galería Knoedler. Esa importante galería de Nueva York, una de las más antiguas y prestigiosas, vendía falsificaciones. Y creo que el hecho de que el FBI lo descubriera y se ocupara de procesar a los individuos implicados sacó a la luz que existía ese fraude en el mercado del arte.

También está el caso del fraude de Rudy Kurniawan con el vino. Algunos de los casos de fraude a gran escala en los que ha trabajado el Equipo de Delitos Artísticos han sacado a la luz el hecho de que no se trata de un mercado regulado y de que hay problemas y muchas falsificaciones.

También está el caso de fraude de un hombre que vivía en West Hollywood y se hacía pasar por adinerado. Compraba obras de arte en internet por cientos de dólares y luego las revendía por cientos de miles de dólares. Y creaba documentos de procedencia falsos para esas obras de arte. Acabó declarándose culpable y recibió una condena de 60 meses de cárcel por fraude postal, fraude electrónico y fraude fiscal.

–Grove: La agente Rivas me invitó al allanamiento que se realizó en ese caso y, debajo de un escritorio, dentro de una valija que tenía el hombre, había varios sellos en relieve que utilizaba para los certificados de autenticidad. Encontrar eso fue sin duda un momento de revelación.Un hombre de Nueva Jersey se declaró culpable de varios cargos después de vender o intentar vender tres anillos del Super Bowl grabados con el nombre de Tom Brady, el mariscal de campo de fútbol. Crédito Oficina Federal de Investigaciones / NYTUn hombre de Nueva Jersey se declaró culpable de varios cargos después de vender o intentar vender tres anillos del Super Bowl grabados con el nombre de Tom Brady, el mariscal de campo de fútbol

–¿En qué se diferencia o se asemeja este trabajo al que hicieron antes? Dicen que a los dos les gusta el arte. ¿Les gustaba el arte cuando empezaron?

–Rivas: La mayor parte de mi carrera la he pasado trabajando en casos de guante blanco, como fraudes. Muchos de los casos de delitos relacionados con el arte son iguales a los de fraude: incluyen alguna forma de dinero. Hoy puede tratarse de un Basquiat, mañana de un Picasso, pero sea cual sea el fraude cometido, lo encaro como lo haría con cualquier investigación de delitos financieros.

–¿Cómo se convierte uno en un experto en arte sobre la marcha?

–Rivas: Mi amor por el arte proviene simplemente de viajar e ir a museos. No he estudiado arte.

Trabajé con un detective de la policía de Los Ángeles que dirigió el departamento de robos de arte durante más de 25 años. Me daba nombres de expertos. Aprendí mucho de él y de otros miembros del equipo de delitos artísticos que habían estado en el equipo antes de que yo me incorporara.

También recibimos capacitación en delitos artísticos, normalmente todos los años, en la que aprendemos a trabajar en estos casos y aprendemos de otros agentes.El agente especial Allen Grove, que ayuda a dirigir la unidad de delitos artísticos del FBI con sede en Los Ángeles. Los agentes que se especializan en casos de delitos relacionados con el arte están viendo un mayor interés en su trabajo. Crédito Jake Michaels para The New York Times / NYTEl agente especial Allen Grove, que ayuda a dirigir la unidad de delitos artísticos del FBI con sede en Los Ángeles. Los agentes que se especializan en casos de delitos relacionados con el arte están viendo un mayor interés en su trabajo

–Antes de empezar, ¿sabían lo que era un Basquiat?

–Rivas: Sí. Si estoy investigando falsificaciones relacionadas con un artista concreto, en general he leído libros y visto todos los documentales. Investigo. Si no lo sé, aprendo. Cuanto más sepas sobre el artista y su estilo, mejor será la investigación.

–Grove: Gran parte de esto es capacitación en el trabajo. Hay una capacitación específica para el Equipo de Delitos Artísticos en lo que se refiere a la manipulación de bienes culturales. Hay formas muy específicas de tratar las obras de arte para poder presentarlas como pruebas. Un cuadro de Basquiat no se trata igual que una pistola Glock 19.

–Rivas: Somos expertos en expertos. Consultamos con expertos, dependiendo del artista o del medio, y confiamos en ellos para que nos ayuden.

–¿Cuántos delitos puede investigar su equipo a la vez y cómo determinan qué delitos se tratará de castigar?

–Rivas: Nuestras pistas vienen de todas partes. Llamadas, víctimas que han comprado algo por internet, otras que han sufrido una pérdida.

A la hora de determinar los casos, miramos si se ha producido un delito y cuál es el plazo de prescripción. Además, vemos cuál es el objeto. ¿Es algo importante para la historia estadounidense, como los zapatos de rubí del «Mago de Oz», que fueron robados de un museo?

Cada fiscalía de los Estados Unidos fija un umbral diferente para los casos penales que quiere llevar a juicio. Tenemos cierta ventaja si se trata de una obra de arte importante.

–¿Qué tipos de delitos artísticos son los más comunes?

–Rivas: La mayor parte del tiempo la dedicamos al fraude. El fraude puede consistir en algo que se vende como auténtico y no lo es; ése es probablemente el mayor delito. Y no se trata sólo de arte. Puede tratarse de recuerdos deportivos. Puede tratarse de estampillas de colección.

El cargo podría ser fraude electrónico, fraude postal. Podría ser un caso de lavado de dinero. Podría ser alguien que hace todo eso y evade impuestos.

–Grove: También hay robos. Si hay un artículo robado que cruza las fronteras estaduales, tenemos un nexo federal.El Art Crime Team tiene su base en una oficina de campo del FBI en el Edificio Federal de Los Ángeles. En los últimos años, el equipo se ha ampliado a dos docenas de agentes estacionados en todo el país. Crédito Jake Michaels para The New York Times / NYTEl Art Crime Team tiene su base en una oficina de campo del FBI en el Edificio Federal de Los Ángeles. En los últimos años, el equipo se ha ampliado a dos docenas de agentes estacionados en todo el país

–Usted mencionó una base de datos federal de arte robado.

–Rivas: Sí, se llama Archivo de Arte Robado. Se puede ingresar el nombre de un artista y ver qué objetos hay en la base de datos. Ha sido muy útil. Si alguien busca en Google el nombre del artista o el título de lo que se está vendiendo, verá que es robado y nos avisará.

–¿Algún consejo final para los coleccionistas o alguna advertencia para quienes, en el mundo del arte, puedan sentirse tentados a delinquir?

–Rivas: A veces es muy difícil que las víctimas crean que han sido estafadas. Muchos estafadores tratan de congraciarse y son muy amables y atentos, y parecen personas muy sinceras. Y creo que muchas de las víctimas no pueden creer que las hayan estafado o que esa persona les haya hecho eso. Hay un elemento importante de confianza.

A los coleccionistas les digo: revisen la procedencia y, si el precio es demasiado bajo y la cosa es demasiado buena para ser verdad, es probable que la obra no sea auténtica. Hagan los deberes. Creo que en el mundo del arte todos buscan encontrar en un depósito o en un mercado de pulgas una obra que es un Picasso auténtico. Las probabilidades de encontrar algo así son muy escasas. Mucha gente está a la pesca y cree haber comprado algo auténtico. Y, por desgracia, no lo es.

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