En Tucumán, igual que en el resto del país, los ciudadanos tienen poca confianza en las instituciones democráticas. Sienten que a la mayoría de sus integrantes les falta demostrar ejemplaridad, honorabilidad y que tienen una verdadera contracción al trabajo. La sociedad se siente mendicante cuando tiene que recurrir a ellas, especialmente al poder judicial, a quien ven como una organización oscura, secreta y poco receptiva a la hora de requerir protección o algún resarcimiento. Esto lleva a una insatisfacción y pérdida de sentido del verdadero valor del sistema democrático.
EDITORIAL
Instituciones sin lustre
26 mayo, 2021