Julieta Luz Porta es una joven mendocina de 24 años de edad de la que seguramente se volverán a escribir varios artículos, pues ya ha representado a la Argentina en sendas oportunidades y se perfila como una joya del emprendedurismo y la innovación local.
Recientemente, representó al país en un Foro de Sustentabilidad Mundial que se realizó en Japón. En el año 2020 ganó, junto a su equipo, el Space App Challenge, organizado por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, en inglés), con la app que desarrolló para evitar algunas de las más temidas catástrofes naturales.
A sus 23 años fundó una empresa que ayuda a los científicos a conseguir los fondos necesarios para desarrollar sus proyectos. Su empresa se llama Mycorrhiza, pero no se detiene ahí. Todavía hay más.
También es la directiva más joven de la Federación Iberoamericana de Jóvenes Empresarios en Madrid, representando a más de 14 países y 120 mil empresarios. Además, represento a la Argentina en Foro Económico Mundial de la Mujer y quedó seleccionada entre 26.000 concursantes tras superar 268 instancias.
— Contame un poco de vos
— Yo tengo 24 años, soy licenciada en Dirección de Empresas y estoy a punto de recibirme como ingeniera, me quedan tres materias y la tesis. Siempre me apasionaron las problemáticas y siempre fui de hacer muchos proyectos, soy muy inquieta. Y eso lo sigo haciendo hasta el día de hoy: me junto con científicos y creo proyectos.
— ¿Cómo es emprender en la Argentina?
— Es desafiante. Hay muchos no, muchos pero, muchos prejuicios, pero para mí es apasionante. Uno tiene que saber que el camino no siempre es lineal y que te vas a encontrar con un montón de obstáculos. Ahí es dónde uno tiene que conocer sus emociones porque va a pasar ansiedad, nervios, frustración, pero cuando pases ese valle de la muerte se encuentra la respuesta y se materializan los proyectos.
— ¿Qué es el valle de la muerte?
— Es ese proceso que pasamos al principio en el que uno tiene esa energía para comenzar. Ya tiene la idea, el equipo para laburarla y de repente te encuentras con un montón de obstáculos que hacen que muchos se queden en ese lugar. Por eso se dice sobre las startups que el 90% falla, porque no pueden superar ese valle que es cuando generalmente te faltan los recursos, o el conocimiento o todavía no encontrás que necesita tu cliente o tu mercado.
— ¿Sentís que falta acompañamiento o inversiones en los talentos emprendedores?
— Creo que el argentino es emprendedor por necesidad y de nacimiento. Los argentinos somos innovadores y eso lo hemos demostrado. Considero que las oportunidades están, pasa que no están a la vista, está en uno el buscar, el indagar, el tratar de encontrar esas posibilidades que, muchas veces no están a la vista o cuando vos aplicaste te va mal. Eso es lo que siempre profeso: la cantidad de veces que te tiene que ir mal, para que en una te vaya bien. Es la misma analogía de las startups. De 10 que hagas 9 van a fallar, pero la que salga la va a romper.
— ¿Te sentiste acompañada a nivel gubernamental o más bien fue un camino en solitario?
— Me sentí respaldada una vez que empecé a ganar premios. Cuando tuve difusión todo cambió. Siento que hay muchos emprendedores que no cuentan con esa suerte y hay un montón de gente en Argentina que está haciendo cosas increíbles pero son invisibles. Creo que no hay que esperar a ganar premios para el que Gobierno apoye. Hay algunos avances, pero siempre se necesita más.
— ¿Cómo fue ser NASA Global Winner?
— ¡Fue una locura! Fui la única mujer latinoamericana entre 26.000 personas que quedaron en el mundial. Todavía no me lo creo (ríe) cuándo me preguntan me da piel de gallina. Me llegó un mail en el que me decían que era la ganadora mundial de la NASA y me estaban invitando ir a la sede de Cabo Cañaveral, al head quarter en Washington, yo no lo podía creer. Fue un boom en general, porque de repente mucha gente nos quería comprar el proyecto y se volvió realidad.
— ¿Cuál fue ese proyecto?
Ese proyecto fue el que hicimos con dos argentinos y un guatemalteco. Se llama Zonda Inc es básicamente una aplicación que enviamos a la NASA para salvar a la gente de las inundaciones y estimar los costos que ocurren en estos desastres naturales en Latinoamérica.
— ¿Cómo funciona Zonda Inc?
La aplicación funciona a través de un algoritmo que usa información histórica. Utiliza monitoreo en tiempo real y predice futuras inundaciones utilizando los satélites de la misión Sentinel-1 de la Agencia Espacial Europea (ESA).
— Contame sobre Mycorrhiza
— Bueno, después de que pasó esto en el concurso de la NASA, la gente me decía: ‘¿cómo hiciste?’, ‘necesito ayuda’, y yo estaba dando talleres y me empezaron a llamar de distintos países para contar mi historia y me dije: si yo puedo ayudarlos a ellos, ¿por qué no puedo ayudar a otros? Y fuimos creando equipos que crecieron muchísimo y Mycorrhiza fue el resultado de ponerle un nombre a toda esa ayuda o esa consultoría que veníamos haciendo para otros proyectos.
— ¿Cómo es ser mujer, joven y emprendedora en mundo que se está deconstruyendo?
— Lo he sentido. Por ejemplo ahora que me tocó representar a la Argentina en Japón lo viví mucho. Es una cultura muy tradicional, pocas mujeres, por ejemplo, menos del 10% en el Parlamento, pocas mujeres trabajando y es una brecha que está muy marcada en algunas fronteras.
Uno de mis pilares es que yo siempre fomento la inclusión, no solamente de las mujeres, sino la inclusión de personas con capacidades diferentes, a las personas de la silver economy que son mayores y que perdieron el trabajo y nadie los contrata o aquellas personas que no tuvieron la posibilidad de estudiar. Y no es solo con las mujeres, sino que es con todos en general.
— ¿Qué importancia tienen este tipo de eventos como el Campus Summit 2022?
— Yo conozco al equipo organizador del Campus Summit porque cuando yo era más chica venía escuchar, participaba de estos eventos y en una de esas veces que vine me inspiré con una historia que contaron acá por qué cuando uno escucha que alguien logró algo capaz lo ve más cercano.
Muchas veces estos eventos son los disparadores para las grandes empresas del futuro. Algo muy loco que me pasa es que cuando estaba más chica me hice muchos amigos en estos festivales y hoy en día son los speakers, o sea que todos han logrado cosas, y me parece que tener la humildad de escuchar a otro te hace verte a vos mismo y encontrarte en esa persona.
— ¿Qué consejo le darías a alguien que está emprendiendo?
— Yo le recomendaría que venga a este tipo de charlas. Qué pida ayuda, que se anime a tocar puertas, a mandar mails, a mandar mensajes. Que pruebe barato, que falle rápido y que siempre consiga equipo, que con él nada es imposible. Con un buen equipo se puede resolver cualquier problema y, por lo tanto, crear cualquier solución. Lo importante es hacer las cosas acompañados.