Por el crimen del padro Oscar Juarez se condenó a Jorge Leonardo Herrera a pena de prisión perpetua.
«Se trató de un accionar artero, decidido, ambicioso y diabólico de Leonardo Herrera, quien debe responder por los agravantes de alevosía, ensañamiento y criminis causae», afirmó en los alegatos finale el auxiliar de fiscal, Rafael Heredia Carreño.
El investigador agregó: «hubo alevosía, fue un accionar sobre seguro, en indefensión, le asestó varias puñaladas por la espalda al sacerdote, que no se pudo defender. Herrera buscó impunidad, él fue a buscar los U$S 60.000; no los encontró, pero sí se llevó dinero. Lo mató para garantizar su impunidad y darse a la fuga».
Una vez que las otras partes completaron sus alegatos de clausura, el tribunal (integrado por Gustavo Aldo Romagnoli, Fabián Adolfo Fradejas y Luis Fernando Morales) procedió a deliberar, para regresar con el veredicto condenatorio de prisión perpetua.
Respecto a la acción civil, se le impuso el pago de $ 3 millones en favor de los familiares de la víctima: $ 1,5 para cada hermano del sacerdote.