El cantautor español Joan Manuel Serrat calificó al presidente chileno, Gabriel Boric, como «un político que, a pesar de su edad, tiene grandes virtudes» y «un hombre con grandes y buenos proyectos». Lo hizo tras haber sido recibido por el mandatario (que tiene 36 años) en La Moneda, durante su último día de gira por Chile.
«No tiene una falta de compromiso con nadie, como pueden arrastrar otros viejos políticos. Viene limpio, en ese sentido, y por tanto la libertad de acción», señaló el catalán.
Serrat dijo que se va «feliz» tras concluir su gira en Chile «con un público absolutamente abrazándome» en los conciertos del sábado y domingo. Y admitió que, si bien le puso «empeño para mantener la alegría, siempre quedan unos granos de tristeza«.Soy tu fan: el largo abrazo entre el Nano y Boric. Hubo piropos mutuos
«Siempre, desde el año ’70, he estado comprometido con Chile y su proyecto político y vital», sostuvo el cantautor al salir del encuentro con el presidente.
Boric fue al último concierto del cantautor catalán el domingo: fue recibido con una fuerte ovación y miles de los asistentes lo aplaudieron y corearon al grito de «Boric, amigo, el pueblo está contigo».
El sábado la ministra portavoz del Gobierno, Camila Vallejo, también estuvo entre el público y fue recibida con aplausos.
Así, Serrat se despidió de su público chileno, tras la última presentación allí de su gira «El vicio de cantar», con la que ha pasado por México, República Dominicana, Colombia, Costa Rica, Venezuela y la Argentina, y que marca el fin de su carrera arriba de los escenarios, según anunció el músico.Este lunes, Serrat y Boric hablaron de todo en el edificio de La Moneda
Su larga historia con Chile
Joan Manuel Serrat debutó en Chile en 1969, en el Teatro Municipal de Santiago, y tocó dos veces en el Festival de Viña del Mar, donde interpretó sus primeras versiones de clásicos de Violeta Parra, Víctor Jara y otros artistas latinoamericanos.
El cantautor tuvo prohibida su entrada al país durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y uno de los episodios más recordados es el de septiembre de 1988, cuando no pudo participar en un acto del cierre de campaña del «No» en el plebiscito que decidió poner fin a 17 años de ese régimen.
La dictadura acusaba al cantautor de “realizar actos contrarios a los intereses de Chile, participar en campañas que ofenden y denigran al Gobierno de la República, participar en campañas políticas contrarias al país y emitir opiniones ofensivas a la patria”, según expresó el entonces Secretario General de Gobierno, el coronel Alfonso Rivas Otárola.El encuentro de Bachelet y Serrat, en octubre de 2006.
A pesar de la prohibición, de todas formas llegó una grabación de Serrat que se emitió en el acto de cierre por los altavoces: “Muy pronto vamos a estar juntos, cuando de nuevo Chile sea lo que siempre fue, un país ejemplo de libertad, de respeto mutuo y de paz”, se lo oyó decir al Nano, firme y comprometido.
Terminada la dictadura de Pinochet, Serrat se volvió una visita recurrente para los chilenos y, así como ahora lo ha hecho con Boric, se ha reunido con otros mandatarios de Chile: como con Ricardo Lagos en 2003 y 2004, y Michelle Bachelet en 2006 y 2015.