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Asesinato del ministro de Catamarca. Barrionuevo sospecha del entorno familiar

El caso del ministro de Catamarca Juan Carlos Rojas, quien fue encontrado muerto en su casa el 4 de diciembre del año pasado, no deja de asombrar y en las últimas horas se sumaron las polémicas declaraciones del dirigente Luis Barrionuevo, quien sin demasiados fundamentos sembró sospechas en el entorno familiar de la víctima.

La polémica se encendió cuando el sindicalista apuntó contra Fernando Rojas, uno de los hijos del ministro asesinado, quien en respuesta a su intento de incriminarlo lo acusó de ser «el vocero del gobernador» Raúl Jalil.

En rigor, Barrionuevo indicó que Fernando Rojas «era el único que tenía las llaves de la casa» donde murió el funcionario y también lo acusó de «limpiar» la escena del crimen.

“El último llamado que él (por Juan Carlos Rojas) hizo fue a la mujer que limpiaba el Sindicato y su casa (por Silvina Nieva) a las 8 de la mañana. La mujer declara que sintió un golpe que fue el ‘mamporro’ que le dieron de atrás, en la nuca, en la cabeza, de un golpe como se matan los toros y él cayó de bruces y se rompió todo el ojo. No fue torturado, él se rompió toda la cara”, aseguró el dirigente sindical.

La versión de Barrionuevo choca con lo afirmado por los hijos del ex funcionario. «Papá fue brutalmente golpeado, lo tuvieron de rodillas y lo golpearon. Le reventaron el rostro, lo tuvieron de rodillas y así lo ultimaron, rompiéndole la base del cráneo», insistieron esta semana en una conferencia de prensa en la que presentaron las crudas imágenes del crimen.

Según informó El Ancasti, el hijo de Rojas declaró: “No concuerdan los horarios que dice él, me habla de unas ojotas, yo en esa reunión en ese día no hablo de las ojotas, yo no soy el que toma la decisión de limpiar la escena, acá tenemos gente de Homicidios que hace entrega de la casa junto con la Fiscalía”.

Es que Barrionuevo no sólo había acusado al hijo del ministro de haber limpiado la escena del crimen sino también de que sólo había una de las ojotas de Rojas en el lugar, la otra no había aparecido.

El joven explicó que «fueron minutos» desde el momento que encontró el cuerpo de su padre y que llamó a la policía. «Quizás él está acostumbrado a ese tipo de escenas, de encontrar personas muertas o escenas de crimen. Él puede estar preparado para esas situaciones. Pero nosotros no”, le respondió Rojas hijo a Barrionuevo.

Las impactantes fotos del cuerpo del ministro de Catamarca

Los hijos del ministro de Desarrollo Social de Catamarca, Juan Carlos Rojas, denunciaron públicamente esta semana que hubo «encubrimiento» del crimen y mostraron fotos del expediente en las que se ve el rostro desfigurado de la víctima, lo que, según aseguran, descarta la hipótesis inicial de una muerte no violenta.

La denuncia fue realizada en conferencia de prensa por los hijos de Rojas, Natalia, Fernando y Mónica, quienes estuvieron acompañados de su abogado Iván Sarquis.

En febrero, Fernando Rojas ya había presentado una denuncia por el supuesto delito de «encubrimiento» en contra de «autores desconocidos», en la causa que investiga la muerte de su padre.

Justamente, el abogado de la familia fundamentó que en un primer momento se había planteado la hipótesis de la muerte natural, lo que marca una “evidente maniobra de encubrimiento». Para Sarquis, «el autor intelectual es el autor del encubrimiento» y, en este sentido, apuntó que «llama la atención el silencio de Luis Barrionuevo, de quienes abrazaron a Rojitas en vida”.

Lo cierto es que la investigación de la muerte de Rojas fue desde un comienzo escandalosa porque primero se pasó de muerte natural a homicidio. A tres días del hecho detuvieron a Silvina Nieva, quien era la empleada doméstica del ministro de Desarrollo Social. Pero una semana después, un juez ordenó la inmediata liberación de la mujer, tras detectar que la detención no fue firmada por el fiscal Laureano Palacios ni por su secretario, a cargo del caso.

Palacios fue posteriormente apartado de la investigación por presuntas irregularidades y fue reemplazado por Hugo Costilla. Paralelamente se solicitó un jury para Palacios por «mal desempeño de sus funciones y falta grave o hechos que pudieran constituir delito en ocasión del ejercicio de sus funciones» y la «ignorancia inexcusable del derecho», ante lo cual, el Tribunal de Enjuiciamiento a Magistrados de Catamarca consideró admisible la acusación y se dio curso al inicio del proceso.

Los familiares del ministro Rojas aseguraron que en los días previos a su muerte había manifestado sobre preocupación por el manejo de las partidas sociales del gobierno de Jalil.