En un documento titulado «Estamos a tiempo», en el marco del primer Consejo Directivo de 2023 -y el primero en meses de inactividad-, la CGT difundió once puntos donde no hay alusiones directas a ningún frente político en particular pero exhortaciones por igual al Gobierno y a la oposición respecto a al presente y futuro de la Argentina. El texto puede entenderse como un prólogo a un acto que esperan concretar entre el próximo 1 y 2 de mayo, en ocasión de celebrar el Día del Trabajo y la Trabajadora, en la jornada previa.
Entre los reclamos que elevaron figuran la reducción de «los actuales índices de inflación, verdadero impuesto a la pobreza que deteriora los salarios y afecta la previsibilidad en materia de inversiones impactando negativamente en todas las variables» así como «la defensa del aparato productivo nacional y la instrumentación de políticas que promuevan el empleo genuino».
También exhortan al «fomento al trabajo argentino a través de prácticas exportadoras con valor agregado«, «el fortalecimiento de los sistemas de salud y seguridad social» y «la promoción de un proceso de movilidad social ascendente y de una justa redistribución de la riqueza que revierta la concentración del ingreso y promueva el equilibrio en la relación capital-trabajo».
En otro punto, la CGT pide «recuperar la independencia económica para evitar que nuestras decisiones soberanas no sufran los condicionamientos de intereses ajenos a la Nación» y se demanda «un mayor compromiso de responsabilidad social empresaria en los sectores formadores de precios«, una línea que venía impulsando el sector más rebelde de la central desde el año pasado, nucleado en torno al moyanismo y la Corriente Federal.
Asimismo, subraya «la necesidad de lograr una mayor participación de la ciudadanía en todos los asuntos de la nación para fortalecer las instituciones democráticas» y apuesta por «la reconstrucción de un Estado promotor del desarrollo, que proteja los recursos estratégicos de todos los argentinos y argentinas y que explote nuestras riquezas de manera sustentable y soberana en beneficio de toda la sociedad».
Como condición, indica que es prioritario «garantizar que estas actividades no agraven la problemática ambiental». También habla de «abordar los cambios en el trabajo asociados a las tecnologías de la información y la comunicación, a la inteligencia artificial y a la automatización de los procesos productivos», en línea con los avances que pueden ponen en jaque al mundo laboral tal cual se conoce.
Respecto a este último punto, sugiere que se debe promover «el diálogo entre los actores sociales involucrados, con el objeto de activar los mecanismos regulatorios necesarios que permitan hacer de la revolución científico-tecnológica un instrumento de transformación para el desarrollo con inclusión social».
Un mensaje político
En el arranque el petitorio, antes de enumerar sus demandas, la CGT se dirige a «toda la dirigencia en general» que «debe tomar conciencia de que ya no hay más margen de deterioro económico sin riesgo de descomposición social».
Con eso en mente, reclama «la convocatoria de un gran consenso político, económico y social que permita alcanzar acuerdos básicos para el diseño de un programa de mediano y largo plazo». Y señala que «el contexto económico y social es de tal gravedad que no permite especulaciones personalistas ni sectoriales«.
Según consta en el documento, el país atraviesa una «crisis económica y social, heredada y agravada por un escenario de inestabilidad macroeconómica que se manifiesta a través de una escalada inflacionaria creciente que pulveriza el poder adquisitivo de los salarios». Y a eso se añade la «escasez de divisas, informalidad laboral y un proceso de aumento en su pobreza estructural, inaceptable para la Argentina».
De la reunión se espera que se defina también una convocatoria para un acto que sería entre el 1 y 2 de mayo para conmemorar el Día del Trabajador y la Trabajadora.