Categorías
Noticias Sociedad

Abrieron una cápsula del tiempo con mensajes escritos hace 25 años: “No conviertan a la Tierra en un desierto”

¿Qué le diría el chico que fuiste en 1998 al hombre o mujer que sos en este 2023? En el medio pasaron unos cuantos mundiales, la crisis del 2001, un peso dejó de valer un dólar, se murió Maradona y Messi pudo levantar la Copa del Mundo después de varios intentos y una final perdida. Quizás ni reconozcas el mensaje que escribiste a los 11 años. Muchas de estas cosas le pasó a los vecinos de Dean Funes, Córdoba, durante la apertura de la cápsula del tiempo de la Bibliteoca Mariano Moreno.

Esta institución de la localidad armó esta iniciativa el 23 de abril de 1998. Ese día en el que se hizo el acto en la plaza del pueblo cordobés, la tapa de Clarín anunciaba una ayuda del Gobierno Nacional por unas inundaciones sucedidas en el norte del país y la Selección Argentina, dirigida por Daniel Passarella, le ganaba un amistoso a Irlanda con goles de Ariel Ortega y Gabriel Batistuta.

Mensaje al futuro

En el patio de la biblioteca de Dean Funes está el cubículo de ladrillos, cerrado con cemento. Este domingo, justo cuando se cumplen 25 años, se rompieron los ladrillos para acceder al material. Es como tomarse un Delorean imaginario y volver a 1998. Los mensajes de los chicos y chicas que con su inocencia auguraban un futuro mejor. También de algunos adultos mayores que sabían que ya no estarían para la apertura, pero quisieron dejar su mensaje a sus hijos y nietos de este futuro.

En el video de 1998 se ve a la directora de ese momento de la biblioteca contar la iniciativa y a un par de albañiles que empiezan a construir el lugar dónde se guardarán las ilusiones durante 25 años.

A diferencia del evento de hace 25 años, esta vez lloviznó sobre la localidad cordobesa. El pequeño cubículo de ladrillo fue abierto con una masa por un albañil voluntario. Tras la apertura, el evento se trasladó hacia el interior de la biblioteca. En diálogo con Infobae, Daniel Quintana, presidente de la institución, definió el momento como de “una gran emoción para todo el pueblo. Había cientos de personas presentes. Muchos de los que habían dejado su mensaje en la urna.

La urna enterrada durante 25 años tuvo algunos problemas con la humedad del piso. “La idea es recuperar y digitalizar todos los mensajes. Son más de 500 y vamos a hacer las publicaciones en las redes sociales con todo lo que dejaron para este siglo, los chicos y adultos del pasado”, explicó Daniel, minutos después de finalizado el acto.

El momento en que rompen el receptáculo de ladrillos que estuvo cerrado durante 25 añosEl momento en que rompen el receptáculo de ladrillos que estuvo cerrado durante 25 años

El futuro ya llegó

Tras la apertura del nicho en el que se guardaba la urna, una Cecilia Merlo adulta se vio de niña dando el discurso el 23 de abril de 1998 cuando se instaló la cápsula del tiempo. Tras el final de video, Merlo habló como aquella tarde de otoño del siglo pasado. “Me veo allí de chica y creo que puedo decir que cumplí muchos de mis sueños. Por otra parte, me veo de adulta y creo que me quedan muchos otros sueños por cumplir”, cerró la mujer su discurso con la clásica tonada cordobesa. Entre el público todos aplaudieron y a muchos se les cayó una lágrima de emoción.

Por su parte uno de los mensajes de los niños leídos anticipaba el futuro que vivimos en esta segunda década del siglo XX. “Hablaba de pantallas, de televisores y celulares inteligentes -relató Quintana-. Es sorprendente la capacidad del chico para dar cuenta de todo lo que estamos viviendo. Hay que tener en cuenta que en 1998 Internet era muy incipiente, no existían las redes sociales ni la posibilidad de sacar fotos o videos con el teléfono móvil”. Al chico sólo le falto prever la pandemia de coronavirus que nos mantuvo en cuarentena durante largos meses del 2020.

Daniel Quintana, presidente de la biblioteca, durante el discurso de apertura del eventoDaniel Quintana, presidente de la biblioteca, durante el discurso de apertura del evento

Luego fue el turno de una mujer que en 1998 tenía 61 años. “Dejó su mensaje con la esperanza de poder abrirlo en el 2023. Y estuvo presente y fue muy emotivo que lo pueda leer a sus 86 años ante el público presente”, contó Daniel, con la mayoría del público aún presente en la biblioteca.

La mujer salió entre el público y se acercó hasta el escenario. Allí de frente al micrófono, tomó el papelito húmedo de color rosa que había escrito en 1998. Recitó la poesía que había escrito en aquel momento. En sus versos, hacía un pedido desesperado por el medio ambiente y terminaba su texto con un mensaje para todos nosotros, habitantes de la Tierra del 2023, “no transformemos a nuestro mundo en un desierto”.

Quintana que en noviembre de este año volverán a convocar a los vecinos de Dean Funes para una nueva cápsula del tiempo. “Será el 3 de ese mes, que la biblioteca cumple 94 años. Lo vamos a dejar por 26 y se abrirá cuando se cumplan los 120 de la fundación de nuestra institución”, informó Daniel entusiasmado por la repercusión del evento.

Así los chicos de hoy preparan sus mensajes, pronósticos y consejos para los habitantes que puedan leerlo cuando casi el mundo llegue a la mitad del siglo XXI. Para ese momento, todos los vecinos de Dean Funes esperan que el ser humano no haya convertido la Tierra en un desierto.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *