La educación universitaria en Argentina es motivo de orgullo por la calidad de los docentes y por el resultado de sus esfuerzos y su vocación. Muchos argentinos brillan en distintos saberes en el mundo. Eso no quita que las universidades deban rendir cuentas de la forma en que administran los dineros públicos.
EDITORIAL
Enseñar con el ejemplo
16 octubre, 2024