Como en cada fin de año es un momento para hacer un balance y examinar los realizado, las expectativas cumplidas y por supuesto aquello que todavía está pendiente de lograr. Así a través del razonamiento uno logra administrar su propia versión, aquello que quiere ser en la vida. Lo mismo pasa con las organizaciones e instituciones, que al igual que las personas tienen objetivos y metas para cumplir y proyectos para buscar alcanzarlos con el tiempo. Se trata de una mirada en doble sentido, hacia atrás y prospectiva, o sea, hacia adelante como lo exige la vida. Y en ese ejercicio se va puliendo la existencia misma y se va construyendo el destino, ese lugar insondable al que aspiramos llegar de la mejor manera posible.
EDITORIAL
Etapa de balance
28 diciembre, 2021