El Presidente, Alberto Fernandez, afirmó días atrás que es injusto que mientras hay personas que tienen tierras improductivas y haya otros carezcan de un terreno. Por lo tanto insinuó, implícitamente, que habría que redistribuir las tierras improductivas. Con esto puso en tela de juicio el derecho de propiedad, que para una concepción como esa solo está justificado si tiene un sentido reproductivo y generador de riqueza. Sin dudas, un cambio de paradigma que no encuentra ejemplos exitosos en ningún país del mundo.
EDITORIAL
Golpe bajo
22 junio, 2021