Si bien las políticas económicas del gobierno de Alberto Fernández tienen inspiración Keynesiana, ya que el Estado es el que con inversión y redistribución busca generar un crecimiento de la actividad económica, estas no dieron el resultado que se esperaba. A la inflación hay que sumarle el desempleo y el crecimiento de la pobreza, con el agravante que debido a una larga y generalizada cuarentena se resintió el sistema educativo, impactando sobre todo en aquellos niños y jóvenes para quienes la educación es una herramienta indispensable para lograr insertarse en el mundo laboral.
Invitado: Daniel Abad
El viento en la cara
21 septiembre, 2021