Hace dos semanas, en medio de loa alegatos del juicio de Vialidad, el nombre de Máximo Kirchner fue nombrado por primera vez en el proceso contra su madre por presunta corrupción en la obra pública vial. Fue a raíz de una serie de mensajes que se extrajeron del celular de José López donde se le consulta al diputado nacional (que por entonces no ocupaba ningún cargo) dónde debían ubicarse las cien cuadras de pavimento que terminaron en manos de Lázaro Báez.
Para el fiscal Diego Luciani eso mensaje en los que también aparecen otros funcionarios, un amigo del ahora diputado y también su ex pareja, significaron una «clara intervención» en ésa y otras obras volcadas a la provincia.
Por eso, en la última audiencia y tras pedir una condena de 12 años para la vicepresidenta, el fiscal Luciani solicitó que se realice una extracción de testimonio para investigar nuevos hechos. En los hechos es un pedido para que se abra otra causa judicial esta vez para investigar a Máximo Kirchner.
La palabra final sobre esa nueva causa la tendrá el Tribunal a la hora de dictar su veredicto. Si hace lugar a esos pedidos de extracción de testimonio, se enviarán a sorteo para asignarle un juez y un fiscal quienes evaluarán si hay elementos suficientes para dar inicio a un nuevo expediente.
Los mensajes de José López a los secretarios de Cristina y Máximo Kirchner
Durante las jornadas de alegatos el fiscal ya había hablado de la «marcada intervención” del hijo de la vicepresidenta. Hay hechos que lo ubican interviniendo en las obras a finales de 2014, según los mensajes del celular de José López. Es por diversos contratos que se volcaban en Santa Cruz, algunos de los cuales terminaban en manos de Báez.
Los mensajes del celular del ex secretario de Obras Públicas fueron incorporados por la fiscalía el 27 de noviembre de 2021. Desde entonces se realizó un análisis de 26.000 mensajes que fueron expuestos en distintos momentos del alegato del Ministerio Público Fiscal.
En ellos se dio cuenta de cómo el ex secretario de Obras Públicas le preguntaba a Máximo Kirchner -que no ocupaba cargos públicos- por diversas obras que el Estado nacional iba a licitar en la provincia de Santa Cruz.
Juicio contra Cristina Kirchner: los diálogos de Máximo Kirchner, Abel Fatala y José López que mostró el fiscal Diego Luciani.
El fiscal Luciani en la última audiencia de alegatos dijo «vamos a solicitar la extracción de testimonios acerca de las posibles ilicitudes de las mismas característas que las que han sido señaladas en este alegato en relación con el Hospital Materno-infantil de Río Gallegos», donde según los mensajes Cristina Kirchner «tenía un particular interés».
Esa obra expuso otra cosa «una brutal connivencia entre funcionarios y empresarios y cómo se cometieron hechos ilegales», dijo Luciani.
El fiscal Diego Luciani en los alegatos contra Cristina Kirchner en la causa Vialidad.
José López pidió acelerar la licitación de esa obra: “Sacalo sin estudios del suelo. Yo te digo lo que hay que poner. Saquemos urgente el llamado Lic”, reclamó. Después exolicó que ya había hablado con la “Pta” y le había notificado que la licitación se haría en 15 días.
«La presidenta se iba interiorizado personalmente sobre el avance las obras en Santa Cruz», dijo Luciani al poner más ejemplos donde muestra que «la ex Presidenta preguntaba por obras puntuales y sus avances».
Los diálogos en los que parece Máximo Kirchner y su amigo Matías Bezi, entre otros.
Por este tipo de mensajes, el fiscal Luciani dijo cuando requirió el pedido de extracción «pedimos que se investigue lo que surgiría de las conversaciones que han sido expuestas por José López y Abel Fatala, como así también de todos los posibles ilícitos que surgen de los mensajes del teléfono de José López, en el que habrían participado diferentes funcionarios y particulares».
En ese momento mencionó a Máximo Kirchner, explicando que también debe ser investigado. Fuentes judiciales indicaron a Clarín que el rol del diputado nacional «como el de los demás intervinientes en diversas obras, debe investigar».
La fiscalía en un comienzo no iba a solicitar que se incluya al hijo de Cristina Kirchner porque no ostentaba ningún cargo público, pero después por la dimensión de obras y el poder de decisión que tenían «se entendió pertinente que se abra una investigación al respecto».
José López y Matías Bezi, amigo íntimo de Máximo Kirchner.
No se deja de lado, además, el vínculo comercial de la familia Kirchner con Lázaro Báez en muchos de los cuales Máximo Kirchner intervino como representante de sus padres. Fue el receptor de 93 cheques emitidos por el Grupo Austral en concepto de diversos alquileres.
Al respecto durante el jucio, la fiscalía insistió: “Sin ser funcionario, Máximo Kirchner intervenía en las obras que se direccionaban en la provincia a favor de Báez”. “López era el que reportaba siempre a Máximo Kirchner avisándole cómo avanzaban los convenios y los proyectos para Santa Cruz”.
Los mensajes a Máximo Kirchner
Al momento de referirse al líder de La Cámpora, el fiscal Luciani seleccionó mensajes referidos a la última licitación que el holding de Báez ganó en suelo santacruceño, un año antes del cambio de gobierno. «Debían apurarse en direccionar el contrato y pagar rápidamente todo, se aproximaban las elecciones presidenciales”, dijo.
Se trató de un plan de 100 cuadras de pavimento en Río Gallegos, financiada con fondos nacionales que demandaron un desembolso de 87 millones de pesos, “pero contó con un avance del 27% y al igual que otras obras, fue abandonada, nunca le importaron las obras pero sí direccionar fondos a favor de Báez”, según determinó la fiscalía.
Máximo Kirchner en la cámara de Diputados
Este proyecto para pavimentar 100 cuadras, expuso el Ministerio Público Fiscal, «pese al argumento reiterado de la vicepresidenta de que todo fue avalado por las leyes de presupuesto, no pasó nunca por el Congreso». Integró según el fiscal, el listad de 17 obras que no se informaron al Congreso por más de 2.200 millones de pesos.
En la primera de las capturas de pantalla compartidas por Luciani en su alegato, José López, entonces secretario de Obras Públicas, se comunica con el amigo de Máximo Kirchner y diputado provincial, Matías Bezi, preguntándole si “había hablado con Maxi y si había decidido cuál sería la ubicación de las 100 cuadras”.
La respuesta fue: “Sí, algo definimos” y contó que se iba a reunir Roberto. La fiscalía indicó que se refería a Roberto Gómez, una persona que trabajaba para Austral Construcciones y fue el responsable de diseñar la obra de 100 cuadras de pavimento. No sólo eso, años después, fue el arquitecto del Mausoleo que Lázaro Báez le regaló a la familia Kirchner, donde descansan los restos del ex presidente.
No fue el único caso. José López le mandó otros mensajes a Máximo Kirchner: “Tengo el trabajo y las fotos de las obras en la provincia y quería hacerte un comentario por esto y por el video de las represas”, se lee que escribió López. En otro mensaje, el secretario de Obras Públicas le dice “Hola (Máximo) me encantó el proyecto del Lago Ortíz , cómo hacerlo estoy viendo y quiero preguntarte”.
¿Qué respondió Fatala? “Hola (José López) ayer estuvo Máximo acá en Piedra Buena y después fue a Puerto Santa Cruz, volviendo a la noche a Gallegos. Nos había pedido las obras y las estuvo recorriendo”.