Tres décadas después, la magia sigue intacta. Al menos, es lo que aseguran quienes pasaron por el set de Abracadabra 2 (Hocus Pocus 2), comedia de enredos deudora del terror y el género fantástico, que desembarca este viernes en Disney+. Secuela de la recordada Abracadabra (1993), vuelve a estar protagonizada por Bette Midler, Sarah Jessica Parker y Kathy Najimi como las hermanas Winifred, Mary y Sarah Sanderson, tres malvadas y queridas brujas que resucitan regularmente para cobrarse su venganza sobre los inocentes niños de Salem, ciudad que se hizo famosa por los arbitrarios juicios por brujería que allí se llevaron a cabo entre 1692 y 1693.
En una reciente entrevista, la directora Anne Fletcher aseguró que “lo más interesante de Abracadabra es que se trata de una película de Halloween que se sigue viendo intergeneracionalmente”. “La mayoría de estos films suelen presentar terror sanguiñoliento para adultos o blancas comedias para chicos jóvenes, pero esta se caracteriza por conjugar el sentido lúdico del entretenimiento con algunos apuntes sociales que hablan del mundo que nos rodea. Por eso nos preocupamos por incorporar la perspectiva de género y el empoderamiento femenino en una aventura que pueda disfrutar y dialogar la familia entera, sea fanática de las Sanderson o no tenga idea de lo que va a ver”, asumió.
Exitoso fracaso
Principios de 1984. Una noche, el productor cinematográfico David Kirschner ve al gato negro de su vecino deambular perdido entre las casas del barrio. Inmediatamente, una pregunta vino a su cabeza: ¿Y si el felino fuera un guardián inmortal, hechizado hace tres siglos? A la mañana siguiente, se juntó con su amigo guionista, Mick Garris, y juntos dieron forma a una epopeya oscura y tenebrosa, marcada por el eterno enfrentamiento entre el gato negro y tres brujas desalmadas, que buscan mantener su eterna juventud absorbiendo la energía vital de los niños que cazan y matan sin compasión. Lograron venderle su idea a Disney, que enseguida tentó a Steven Spielberg para que dirigiera Disney’s Halloween House, uno de los primeros intentos serios de la compañía por pisar fuerte en el terreno del terror moderno. Pero el creador de ET declinó la oferta y el proyecto fue a dormir al archivo.
Durante siete años, pensando en el Halloween que se avecinaba, Disney desempolvaba la idea para volver a desecharla. En el camino, sin embargo, le fue realizando varios cambios: de tono, volcándola hacia la comedia familiar que más identificaba a la marca; de grupo etario, descartando a los menores para concentrarse en dos protagonistas adolescentes que justificaran la incorporación de una subtrama romántica; y también de título, pasando a llamarla Abracadabra. El espaldarazo final llegó en 1992, cuando Bette Middler dijo que sí. Para secundarla, el estudio eligió a una actriz con cierto renombre en los escenarios del off-Broadway, Kathy Najimi, y a una figura relativamente desconocida pero en ascenso, Sarah Jessica Parker, que se convertiría en megaestrella recién seis años después, gracias a Sex and the City.
El 16 de julio de 1993, Abracadabra llegó a los cines estadounidenses. Y contra todos los pronósticos, fue un rotundo fracaso. La crítica la destruyó, el público le dio la espalda y Disney perdió cerca de 17 millones de dólares. De acuerdo con Kirschner, “pasó a ser un stock fílmico que se emitía por los canales televisivos de Disney un par de veces al año, cada octubre, para Halloween. Y en esas repeticiones, de a poco, fue redescubierta por la audiencia, que empezó a amarla. Cada año, se fue transformando en una de las películas más vistas de la temporada. Primero se convirtió en un clásico de culto. Y después, en un clásico a secas”.
Tanto, que en 2014 se empezó a hablar de una secuela. Esperada por los fans, dilatada por las agendas profesionales de Middler y Parker, la continuación pareció naufragar en un par de ocasiones. El primer salvavidas llegó en julio de 2018. Para calmar ansiedades, Freeform Books publicó Hocus Pocus & the All-New Sequel, novela de A.W. Jantha que continuaba la trama en tiempo real, veinticinco años después de los sucesos del film, enfrentando a la hija de los protagonistas contra las hermanas Sanderson. Y en 2020, los astros se alinearon. “Todas nos pusimos de acuerdo en que era el momento justo de volver a unir a la banda -dijo Lynn Harris, productora de Abracadabra 2-. Bette, Sarah y Kathy estaban muy emocionadas; y tenían una serie de propuestas que tomamos en cuenta a la hora de trabajar el guion final. A pesar de los años pasados, seguían conociendo a la perfección la naturaleza de Winnie, Sarah y Mary; y sabían qué querían decir con ellas. Quedó claro que la película no sería un simple ejercicio de nostalgia”.
Contra la opresión machista
Fuera de la pantalla, las cosas cambiaron mucho desde 1993. Principalmente, en el campo de lucha de los derechos de la mujer. Logros concretos que Abracadabra 2 plasma declamativa y narrativamente. “Se trata de un emocionante mensaje sobre el poder de la hermandad -asegura Harris en una entrevista-. En el caso de las brujas, porque literalmente son hermanas y, aunque tengan sus desacuerdos, el amor que las une es y seguirá siendo inquebrantable. Pero también de la hermandad entendida como sinónimo de sororidad, esa solidaridad que fluye entre mujeres ante las actitudes y comportamientos machistas de las que son víctimas”.
Sin buscar la hondura existencial que Arthur Miller elaboró en Las brujas de Salem, la película articula la hechicería como metáfora de la anhelada liberación femenina en tiempos de opresión patriarcal; y la caza de brujas como expresión de cualquier tipo de violencia de género ejercida por el hombre. “En el 1600, las mujeres eran asesinadas porque querían hacer oír su voz, algo que todavía sigue pasando. Quise que el inicio de la película enlazara directamente con el 2022, con lo que están pasando las mujeres y las niñas en este momento”, asegura Fletcher.
Por eso, aún siendo una secuela, el film también funciona como precuela, con un par de escenas clave, durante la adolescencia de Winifred, Mary y Sarah Sanderson (interpretadas por Taylor Paige Henderson, Nina Kitchen y Juju Journey Brener, respectivamente), en el lapso que va desde su iniciación en las artes ocultas y su muerte en la horca durante los juicios de Salem, en 1693. “Conocer parte del origen de las hermanas Sanderson, nos permitirá comprender un poco mejor el por qué están tan enfocadas en la venganza -adelanta Fletcher-. Saber qué les pasó cuando eran niñas, nos ayudará a entender quiénes son en la actualidad”. Y cómo su historia personal puede interactuar con las de Becca e Izzy (Whitney Peak y Belissa Escobedo), dos estudiantes de la secundaria local que, sin querer queriendo, despertarán de su sueño de muerte a las brujas.
Ambientada en 2022, Abracadabra 2 hace de cuenta que la novela de 2018 nunca pasó; y no retoma la historia ni recupera al resto de los protagonistas del film original. Salvo al zombie Billy Butcherson (Doug Jones), antiguo novio de Winnie que pasará por un necesario proceso de deconstrucción masculina. “Por cuestiones argumentales, elegimos usar personajes nuevos -cuenta Fletcher-, pero llenamos la película de citas, referencias y juegos relacionados con el primer film, incluyendo al gato negro. Si fuera una fanática de la saga, miraría todo con ojos muy atentos. Y no me perdería, por nada del mundo, la escena post-créditos”.
Quién es quién
Winifred “Winnie” Sanderson (Bette Middler): la mayor de las tres hermanas Sanderson y guardiana del libro de hechizos. La más inteligente del cónclave de brujas que amenaza a Salem, domina como nadie la magia negra, aunque su mayor poderío reside en la electroquinesis.
Mary Sanderson (Kathy Najimy): la hermana del medio. Bastante torpe e insegura, busca siempre la aprobación de Winnie. Tiene un olfato mágico que le permite oler la presencia de niños a mediana distancia.
Sarah Sanderson (Sarah Jessica Parker): la menor de las hermanas es también la más inmadura del trío de brujas. Lujuriosamente naif, puede hipnotizar a la gente con su canto de sirena.
Billy Butcherson (Doug Jones): antiguo novio de Winnie, envenenado en 1693 por la mayor de las Sanderson, después de haberlo descubierto coqueteando con Sarah. Reconvertido en zombie, suele ser resucitado de entre los muertos para brindar su ayuda (o combatir) a las tres brujas.
Becca (Whitney Peak) e Izzy (Belissa Escobedo): mejores amigas y estudiantes de secundaria, interesadas en el arte de la brujería. Por accidente, terminan conjurando a las hermanas Sanderson.
Cassie Traske (Lilia Buckingham): la hija del alcalde de Salem supo ser amiga de Becca e Izzy, pero desde que se volvió una de las alumnas más populares de la secundaria, se alejó de ellas.
Madre Bruja (Hannah Waddingham): malévola y siniestra hechicera, responsable por iniciar a las jóvenes hermanas Sanderson en el camino de la brujería.
Gilbert (Sam Richardson): dueño del Olde Salem Magic Shoppe, museo y negocio de recuerdos de la ciudad, montado en la que fuera la casa de las Sanderson