Maximiliano Pullaro tuvo su revancha. Fue él quien en 2021, en las PASO para senadores nacionales, quedó relegado por Carolina Losada que se alzó con el triunfo por un margen muy ajustado de alrededor de 2%. Ahora, este político nacido en Hughes el 6 de diciembre de 1974, al sur de la provincia, pero que se fue a estudiar a Rosario Ciencias Políticas y aquí hizo su vida y fortuna (fundó empresas), quedó como el favorito para ganar la provincia en las generales del 10 de setiembre.
No pudo Losada, periodista lanzada a la política y que irrumpió como una figura fresca en la escena nacional en 2021, pese a la dura campaña que planteó, acusando a Pullaro de presunta complicidad con el narcotráfico. Habló de “muertos en el placard”, y de otras cosas espesas.
Al contrario, los cuatro años de Pullaro como ministro de Seguridad provincial, en la gestión del socialista Miguel Lifschitz (2015-2019), en los que -en respuesta a Losada- se jacta de haber bajado el crimen y de “yo metí presos a Los Monos y a los Alvarado”, más bien terminaron por construir su carrera. Y justamente en una campaña que por la situación de la violencia del narcotráfico en Rosario, estuvo muy atravesada por la cuestión de la seguridad.
“Pullaro es expresión del radicalismo territorial, que en Santa Fe, existe”, señala un dirigente peronista, que fue también su contemporáneo en la Universidad Nacional de Rosario. “Pullaro es incansable, y como ya mostraba en la universidad tiene una ambición enorme también, que le tracciona su vida cotidiana”, lo retrata.
El pueblo de Hughes está en el departamento de General López, cuya principal ciudad es Venado Tuerto. Una zona «conservadora», dicen, y agropecuaria de la provincia, un sector donde Pullaro pisó con fuerza en estos comicios, como en el resto del interior.
Terminó recostado en el apoyo de Horacio Rodríguez Larreta -de cuyo sector es la vice Gisela Scaglia, diputada nacional. Pero muchos creen que es un “pragmático” que como sea que terminen las cosas en la agitada interna PRO, tendría también buen rapport con Patricia Bullrich.
De hecho, en el pullarismo en los últimos días de campaña se ocuparon de recordar que ambos fueron ministros (nacional, provincial) del área de seguridad y les tocó interactuar, en esos años. Lo que no significa que todo haya ido de maravillas: más bien hubo duros cruces y desprolijidades a granel a poco que debutaran todos en el caliente diciembre de 2015, con la cinematográfica triple fuga de los hermanos Cristian y Martín Lanatta y Víctor Schillacci.
Mensajes internos
Al contrario de Losada, el ex ministro en campaña siempre bajó el mensaje que de resultar elegido, iba a convocar a todos los sectores.
Pullaro provincializó mucho más su campaña que la senadora. Uno de sus armadores definió que tuvo una “capilaridad territorial” más importante, con apoyo del presidente de la UCR santafesina, de la mayoría de los diputados provinciales del partido, de 120 intendentes y jefes comunales y listas en 300 de 350 pueblos, 60 provistas por la aliada Democracia Progresista.
Si Pullaro es elegido gobernador en setiembre -lo mismo hubiera sucedido con Losada- volvería a haber un mandatario radical en la Casa Gris después de muchas décadas. Hay que remontarse a 1963, cuando Arturo Illia ganó la presidencia, cuando el último gobernador radical estuvo en Santa Fe, Aldo Tessio.
Desde 1983, Santa Fe fue “una provincia peronista”, con una hegemonía que quebró el primer gobernador socialista de la historia del país, Hermes Binner, en 2007. Luego vinieron los mandatos socialistas de Antonio Bonfatti y de Miguel Lifschitz, hasta que Omar Perotti recuperó para el PJ en 2019.
Pullaro, del sector Evolución que se referencia en Martín Lousteau, hizo toda la carrera con que se entroniza un dirigente en la UCR. Fue diputado provincial. También fue presidente del Comité Departamental de la UCR Gral. López, vicepresidente del Comité de Provincia de la JR y presidente provincial del grupo NEO de la Unión Cívica Radical. Además, delegado en el Comité Nacional de la Juventud Radical.
