Diana Mondino eligió su «casa», la Bolsa de Comercio de Córdoba, entidad de la que es vicepresidenta, para dejar en claro que si gana Javier Milei será en los hechos más herbívoro de lo que el león ruge en sus discursos.
Mondino dejó en claro que, en caso de ser presidente, Milei respetará el presupuesto que vote el Congreso este año, no tocará la Asignación Universal Por Hijo y el recorte de personal estará limitado a «los de arriba». También relativizó los plazos de la dolarización: «La economía se está dolarizando sola», dijo la eventual canciller.
«El primer año, gane quien gane, deberá respetar el presupuesto. Lo que hemos visto es que la mitad, aproximadamente, no se puede cortar porque son jubilaciones, asignaciones universales por hijo, etc; en definitiva, el gasto de Anses», aclaró Mondino respecto del «plan motosierra». En ese sentido, lo limitó a «un montón de actividades que pueden reducirse», y detalló: «Con la unificación de Salud, Trabajo y Educación en un ministerio, se logrará coordinación y mejor uso de recursos».
Ante 250 empresarios que son, básicamente, sus amigos y/o clientes, Mondino aclaró que la reducción de personal estatal apuntará a funcionarios: «Serán los de arriba. Todos vieron el festival de nombramientos que se viene dando; te dejan las manos atadas con alambre de púas. Pero a lo que no se está obligado es a hacer aumentos salariales, y es posible reasignar tareas al personal. Gane quien gane no podrá mover mucho en esa estructura de costos; entonces, hasta tanto se pueda, vamos a bajar los subsidos económicos, que son el 18% del gasto público». En ese recorte parece estar el corazón de la motosierra.
Tampoco pasó inadvertida la ovación que recibió Mondino. Aunque la Bolsa es su casa, la entidad fue afín a Juntos por el Cambio. De hecho, su jefe de investigaciones es Guido Sandleris, quien llegó como movimiento refractario a la Fundación Mediterránea, que contrató a Carlos Melconian como cráneo de un plan económico para el próximo gobierno de Juntos. Finalmente, Patricia se inclinó por Melconian. En ese contexto repleto de suspicacias y reproches, Mondino dijo que hay macristas que se están «acercando» a La Libertad Avanza. «Veremos qué pasa», intentó jugar al misterio Mondino.
Al meterse de lleno en la dolarización, dijo que es «un instrumento para solucionar cosas, para que nadie venga a romper todo de nuevo». «Es como un by-pass gástrico: te sirve para bajar de peso, pero si después seguís comiendo como siempre, vas a aumentar de peso de nuevo», ejemplificó.
En ese punto, dijo que el ajuste de Milei es un «nunca más». «El asunto son las condiciones precedentes, todo lo que debo hacer para que sea factible. La vemos como un ‘nunca más’. Nosotros partimos de pensar en Rosita y sus dos hijos, una madre soltera, docente. Nos preguntamos, ¿cómo logramos que pueda ahorrar, qué condiciones hay que generar? Moneda estable, sistema financiero razonable, mercado de capitales, mayor productividad en la economía, bajar el gasto público. Es un enfoque diferente al de siempre (que es) tratar de poner pequeños parches al desastre», dijo Mondino.
No dio precisiones respecto de los plazos de una eventual dolarización. Al contrario, pareció dejar esa estrategia en manos del mercado: «La economía se está dolarizando sola. Es algo que va siendo natural, haciendo la salvedad del cepo, pero vemos los alquileres urbanos, los alquileres en el campo».
No pasó de largo la opinión que dio su hermano Guillermo, discípulo de Domingo Cavallo y asesor de Ecuador durante la dolarización en aquel país. Para Guillermo, dolarizar en Argentina es dar «un salto al vacío» y que los gobernadores no bajarán el gasto, sino que emitirán cuasimonedas. «¿Vas a dejar de hacer algo que quizá sea bueno por las dudas alguien haga algo malo?», dijo Diana para gambetear la disputa familiar.
También aclaró que los plebiscitos que propondría Milei son dos, no todas las leyes: dolarización y aborto, una ley penal ya sancionada. En el resto, manda la rosca: «Es la primera vez que habrá un Congreso que no será una escribanía. No pensé que íbamos a tener tantos diputados, de acuerdo al resultado en las Paso, pero todos vamos a tener que negociar. Todos. Nadie va a tener una mayoría absoluta». En ese sentido, aclaró: «Todo lo que propone Javier está en el marco de la Constitución. Nada fuera de la ley».
En cuanto a su futuro rol como canciller, dijo que su misión estará enfocada en que Argentina «deje de dar lástima en el mundo, deje de mendigar». «Los tratados comerciales han sido sólo arancelarios en Argentina y queremos un ministerio que logre tratados que homologuen organismos de control, por ejemplo», dijo Mondino, un baldazo de agua fría a los postulados de Milei. Respecto del Mercosur, pidió un «pequeño toque» para potenciarlo: «El Mercosur viene funcionando como una unión aduanera y con un pequeño toque puede dar un gran vuelco. Hay que asociarse, negociar entre nuestros países, en forma conjunta con el resto del mundo. Eso será fantástico para los cuatro».
Como una campeona, esquivó otra polémica: el ingreso de Argentina al bloque Brics: «Fue una sorpresa, no estaba en agenda. Es un tema muy serio porque Argentina no tiene el aporte de capital para participar, es solo una cuestión para decir ‘aquí está Argentina’ y nada más».