El director de El Destape, Roberto Navarro, sorprendió con fuertes críticas hacia Cristina y Máximo Kirchner y se metió de lleno en la interna entre el líder de La Cámpora y Axel Kicillof.
Los cuestionamientos se hicieron en el pase entre el programa Habrá Consecuencias y Navarro 2027, el momento con mayor pico de audiencia en la señal afín al kirchnerismo. «Ya está Cristina. Ya está. Yo entiendo que querés que Máximo sea presidente, pero no va a ser presidente. Quizás lo sea en algunos años. Yo reconozco que es un tipo valioso», lanzó.
Las declaraciones llegaron minutos después que Máximo accediera a una extensa entrevista con Roberto Caballero en AM 530, la radio de Madres de Plaza de Mayo que ahora controla La Cámpora.
Los dichos de Navarro complican a Kicillof porque hacen emerger la interna entre el gobernador y el presidente del PJ bonaerense. Sucede que Navarro es uno de los periodistas más cercanos a Kicillof (incluso marcharon juntos en el paro general del 24 de enero) y en el entorno de Cristina y Máximo les cuesta mucho creer que Kicillof sea ajeno a los duros cuestionamientos del director de El Destape.
Esto se suma a otras señales políticas, como las también explosivas declaraciones del intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, reveladas en exclusivo por LPO, en las que llamó al peronismo bonaerense a construir un armado en torno a la candidatura presidencial de Kicillof y contra La Cámpora. Luego de ese acto, el gobernador recibió al intendente.
Como sea, durante el pase entre los dos programas de El destape hubo un cuestionamiento muy fuerte al rol de Cristina Kichner en el peronismo durante los últimos años.
Navarro recordó que el primer tuit de Cristina hacia Alberto fue a tres meses de asumir en el gobierno y la frase sobre «funcionarios que no funcionan» llegó en diciembre, cuando todavía el gobierno venía gestionando la pandemia con relativo éxito en comparación con otros países. «Es una lucha de poder. Porque Cristina no quiere ser presidenta, pero quiere manejar al presidente, al gobernador, a todos», dijo.
También cuestionó la decisión de generar internas para evitar que emerjan nuevos líderes. Recordó que en 2015 forzó una interna entre Aníbal Fernández y Julián Domínguez en la provincia. En 2019 eligió a Alberto, pero lo condicionó a los pocos meses. Y en 2023 le armó una interna a Sergio Massa con Juan Grabois. «Lo que yo pienso es que hay que renovar el campo popular. ¿Por qué una persona va a decidir por todos?», opinó.
Además, contó que el año pasado la vicepresidenta pidió un operativo clamor sabiendo que no iba a ser candidata. Su idea -según Navarro- era quedar empoderada y volver a elegir al candidato.
«Por qué el pueblo se tiene que bancar a Milei por los caprichos de una persona. No puede ser. Nos llevaron hasta Milei con todos estos fracasos. Yo siempre le digo al público cosas que a muchos no les gusta, pero alguien tiene que decirlo. Hay que terminar con esto», dijo Navarro.
«Hagamos una cara de Cristina en el obelisco. Se lo merece porque es una de las grandes líderes del mundo. Pero no quiere ser presidenta y quiere elegir el presidente y manejar el gobierno. Y eso sale mal», agregó.
En el pase hubo una fuerte defensa a Kicillof como contraposición a Máximo Kirchner. Incluso se cuestionó «la intervención» en la provincia -ordenada por Cristina- a través de Martín Insaurralde y Leonardo Nardini.
«Hay que habilitar que nazca un nuevo líder. Pero el problema es que cuando quiere asomar un líder, lo condicionan. Cuando Axel habló de nuevas canciones lo atacaron, casi lo matan», aseguró Navarro.
Sobre el final se planteó que el peronismo pudo retener la provincia de Buenos Aires debido a que Kicillof tiene una imagen de austeridad que soportó el escándalo de Insaurralde en Marbella.
«Cristina le puso a Insaurralde sabiendo que era una bomba de tiempo», analizó Navarro y el periodista Adrián Murano le recordó que en el congreso del PJ bonaerense de Cañuelas, Máximo Kirchner dijo que la elección en la provincia la ganó el peronismo bonaerense. «Bueno, hubiera sido candidato él entonces», cerró el director de El Destape