“Hay que seguir haciendo, como podamos, contra los molinos de viento”, asevera con lucidez Gastón Portal, guionista, productor, director e hijo de la productora Lucía Labora y del recordado Raúl Portal, aquel hombre que sacudió el almidón y la modorra de la tv en los ’80 y ’90. En 1994, muy joven, creó GP Medios una de las primeras productoras independientes de televisión de la Argentina con las que exploró los límites de creatividad en programas como “PNP” (Perdona nuestros pecados), “RSM” (El resumen de los medios), “Medios locos”, “Magazine For Fai” o “Los fuegos con Francis Malman”, entre otros éxitos. En 2009, se asoció a la BBC, con el objetivo de adaptar sus formatos para América Latina. En 2019 dirigió el largometraje “La noche mágica”, premio del Jurado en el Festival de Friburgo, Suiza. Este año debuta en la novela con “Cyrana”, editado por Planeta, donde una madre usurpa la identidad de su hija en redes sociales para ayudarla a seducir a un muchacho. Por si fuera poco, reparte su creatividad entre un nuevo libro llamado “El fin de este mundo” y los futuros largometrajes “Cleopatra” y “Argenchina” con weLABit, su nueva empresa de contenidos. Estuvo en pareja con Mariana Fabbiani y se casó con Belén Laurence, con quien tuvo tres hijos: Olimpia, Gala y León.
Sumamente cordial, con voz grave y seductora, recibe al periodista en su departamento de Palermo regado de libros donde conviven autores como Thomas Bernhard, Julio Cortázar, Jorge Luis Borges o la legendaria colección Austral editada por Espasa Calpe.
Noticias: ¿Qué recuerdos conserva de su padre?
Gastón Portal: Muchísimos, sobre todo, la relación que teníamos que nunca fue estrictamente la de padre e hijo; fue casi de amistad. No sé si es que él era muy infantil o que yo fui muy maduro cuando era chico.
Noticias: ¿Eran compinches?
Portal: Totalmente. Yo lo seguía en todas sus locuras y él me apoyaba en las mías. Siempre fue como un padre muy estricto en los valores, en lo que estaba bien y lo que estaba mal, pero al mismo tiempo, me dio una inmensa libertad desde muy niño.
Noticias: ¿La imagen que él transmitía públicamente tenía su correlato en la vida privada?
Portal: Exactamente, un loco. Recuerdo que antes de que fuera famoso, iba al colegio a buscarme y era un personaje que llamaba la atención porque no paraba de joder con todo el mundo.
Noticias: ¿Usted empezó a trabajar en producción en su adolescencia?
Portal: Sí, a los 14 años, en radio junto a mi viejo. Nos complementábamos mucho porque él era todo palabra e imagen y a mí siempre me gustó el otro lado, la edición. Lo que después fue “PNP” (Perdona Nuestros Pecados) en tele, mucho tiempo antes, lo hacía en radio.
Noticias: ¿Cuándo arrancó en televisión?
Portal: En “Semanario Insólito” (Canal 7, 1982), donde yo hacía desde las fotocopias hasta el café. En esa época se experimentaba y era una cosa lúdica para mí, pero me daba unas herramientas increíbles para mi edad, No era trabajo, debe ser por eso que estaba tan contento de hacerlo (risas).
Noticias: Ya hablamos de recuerdos, ahora dígame, ¿que heredó de su padre?
Portal: Heredé o aprendí el humor que él tenía y esa capacidad de ver el absurdo en lo cotidiano que también tienen mis hijos. Hay algo del sarcasmo y la ironía que si te corrés unos centímetros de la realidad, todo empieza a verse un poquito absurdo. Todo lo que escribo tiene esa forma de ver el mundo. Mi viejo era fanático del cine italiano de Mario Monicelli, Dino Risi y Fellini. Ellos te mostraban un drama increíble, pero en el medio había una situación absurda que te daba risa. Bueno, yo juego con mis hijos con ese sarcasmo todo el tiempo. Por ejemplo, elegimos un tema y tenemos que hablar irónicamente, diciendo lo opuesto a lo que queremos decir. Son charlas absolutamente voladas en las que ellos identifican la ironía.
Noticias: ¿Qué siente si compara aquella televisión con la actual?
Portal: Hace rato que la televisión, como la concebíamos, ya murió. Antes todo era a favor de la originalidad. Cuando ibas a proponer un programa, tenía un valor ir con una idea original, algo nuevo. Todos queríamos hacer cosas diferentes. Esa tele, de pronto, se transformó y empezó a manejarla gente que quería hacer un negocio. Antes siempre daba pérdidas, no daba ganancias. Cuando se comenzó a concebir como un mercado cambió el concepto y ahora se busca lo probado.
Noticias: Este año se editó “Cyrana”, su primera novela. ¿Le costó animarse a publicarla?
Portal: Como guionista y director, para escribir cada historia, cada “biblia”, como se dice cuando presentas un contenido, siempre empiezo por un pequeño cuento para pensar bien en los personajes. Recién cuando tengo eso listo escribo el guion. Cuando comencé con la historia de Emilia, me fui dando cuenta que era para desarrollarlo en más de doscientas páginas y el disparador final fue la pandemia. Escribir es una tarea dura y metódica, pero logré sacarme la mochila de la no publicación.
Noticias: En la historia es muy importante el tema del intercambio de identidad.
Portal: A mí me obsesiona, como temática, la identidad. Los guiones que se me ocurren siempre tienen algo que ver con una falsa identidad o el concepto de que uno, con el paso del tiempo, va siendo diferentes personas. Todo el tema de los desaparecidos y la apropiación de identidades es algo que siempre me obsesionó. Es algo que tenía en la cabeza y pude plasmar en esta historia que demoré seis meses en escribir. Después, el proceso de reescritura y correcciones me llevó dos años, pero Nacho Iraola, el editor de Planeta, fue muy receptivo y le interesó la trama.
Noticias: A juzgar por la cantidad de libros que veo en sus bibliotecas, deduzco que siempre le gustó la literatura.
Portal: Los libros para mí fueron y son como vivir otras vidas. Viste cuando alguien dice, ¿para qué sirve la literatura? Para poder vivir y no ser siempre vos. Para mí esa es la gran diferencia que hay entre leer y no leer.
Noticias: ¿Autores que lo han marcado?
Portal: Tuve una época de lectura de clásicos que comenzó en mi adolescencia con libros como “Rojo y negro”, de Stendhal y me identificaba mucho con Julien Sorel, el protagonista. Lo viví como si fuera algo que yo necesitaba expresar y lo había hecho otro. También Kafka, me rompió la cabeza porque a mí me obsesiona todo lo onírico y creo que él descubrió cómo expresar esa impotencia de los sueños. De los nuestros, Cortázar, a quien siempre vuelvo. Me gusta ese manejo de lo absurdo y de aquello que puede o no ser posible. Siempre me gustó ese desparpajo que él tiene.
Noticias: ¿Inculcó esa pasión a sus hijos?
Portal: Tenemos un espacio al que llamamos “reading time”. Todos los días paramos por espacio de una hora u hora y media, cada uno agarra su libro y leemos. Yo sugiero de acuerdo con sus edades, pero ellos eligen. El hecho de estar con un libro ayuda a inculcar la lectura. También trato que escriban como ejercicio y vemos cine en casa como una rutina. Siento que lo único que puedo realmente inculcarles es que no les roben la curiosidad.
Noticias: ¿Cómo se lleva con las redes?
Portal: Bien, pero solo por curiosidad y por ver cómo es el mundo de gente que no conozco. En internet hay toda una locura que parece una película de Godard (risas). Se usa un lenguaje que a todos nos parece normal y de repente te aparece un tipo que canta, una mina que muestra el culo, un pajarito que es acariciado por un mono y accidentes.
Noticias: Tiene muchas actividades. ¿Duerme lo suficiente?
Portal: Poco, pero fue una decisión que tomé desde los veintipico. En un momento me di cuenta que la gente dormía más de 1/3 de la vida y me pareció increíble que esto se acepte mansamente. Dicen que es muy importante dormir ocho horas, pero me acostumbré a dormir cinco. Hay veces que me quedo escribiendo hasta que amanece, pero disfruto ese silencio nocturno.
Noticias: ¿Cómo vive la situación relacionada con los anunciados recortes a la actividad cinematográfica?
Portal: Con tristeza e indignación. No porque esperara otra cosa, pero cuando una persona piensa más en números que en letras es muy difícil que pueda valorar la cultura. Lo mínimo que se espera es que baje la inflación, pero a nivel cultural, no se puede esperar absolutamente nada. Habrá que seguir haciendo como cada vez que esto pasó. Y no estoy hablando de ningún tipo de ideología porque no me gusta ninguna de las opciones políticas que hay.