En medio de la investigación por el crimen de Catalina Gutiérrez, la influencer asesinada el miércoles pasado en Córdoba, el padre de la víctima, Marcelo Gutiérrez, reveló que el principal sospechoso de matar a su hija apareció en la comisaría cuando la familia se enteró del femicidio. “Es macabro”, señaló sobre Néstor Soto (21), amigo de la joven y único detenido en la causa.
Según relató, Soto fingió estar compungido cuando se encontraban en la delegación policial luego de haber notificado como desaparecida a Catalina y de enterarse que la habían encontrado muerta. “¡Quién pudo haber hecho esta locura!”, comentó el padre que dijo el principal apuntado por la Justicia, quien incluso abrazó a la madre de la víctima para darle aliento.
“A mí no (me abrazó), gracias a Dios, porque me hubiera dado asco después de todo lo que pasó, una repulsión. Pero estuvo ahí, presente. Nosotros hicimos la denuncia en la comisaría y estábamos todos ahí y él llegó. Es más, él llegó con el novio. Era una cosa espantosa, es macabra. Creo que en ninguna película hubiera sucedido una cosa así”, mencionó Marcelo a El Doce desde la habitación que pertenecía a la joven.
“Es alguien desquiciado que no merece vivir en este mundo”, sentenció al reconocer que nunca sospechó de que pudiera ser capaz de un acto así, ya que entendió que era una persona de confianza, sobre todo, porque hace más de tres años que era amigo de Catalina. Asimismo, no pudo confirmar si el detenido contó con ayudantes, pero anticipó que era cuestión de tiempo de que se supiera.
El padre de la víctima -que es arquitecto, la misma carrera que estudiaban tanto su hija como el sospechoso- recordó también que Catalina llevaba frecuentemente a Soto a la casa. “Venía…Toda persona que viene con nuestros hijos se supone que es de confianza”, indicó.
“Después de tanto tiempo, más de tres años desde que se conocían, lo invitaba a cenar, a almorzar, lo iba a buscar en el auto porque quedaba acá cerquita en Barrio Jardín, lo traía porque era de noche, tarde”, detalló sobre la relación de su hija con su presunto femicida, a quien había pasado a buscar esa misma noche antes de su asesinato.
En este sentido, Marcelo señaló que nadie de la familia tuvo sospechas sobre el amigo. “Con Catalina estaba un rato; estudiaba, se iba. Pero no había manifestado nunca ningún comentario, ni de Lucía (su otra hija). Por ahí mi mujer, creo que ella en alguna oportunidad dijo: ‘Che, ¿este chico no estará enamorado de vos? (Pero Catalina respondió): ‘No, para nada’. Nunca nada”, afirmó.
Asimismo, comentó que Soto estaba al tanto de que su hija tenía novio formal. “Fijate vos la cabeza de una persona desquiciada, porque ella esa misma noche (del femicidio) se juntaba con el novio, iban juntos. Es una cosa que tiene que hacer alguien desquiciado, una persona enferma, que no se merece vivir en este mundo. Quiero toda la justicia que le corresponde por la barbaridad que hizo, que pague con la pena máxima”, exigió el arquitecto.
A su vez, mencionó que vecinos de la zona le ofrecieron una gran cantidad de cámaras de seguridad que registraron el encuentro entre el presunto asesino y la víctima durante la noche de los hechos. “Está todo filmado. Amigos, gente que tiene comercios ahí y se indignaron, tenían cámaras y me dijeron que se vio todo. Ahora lo tiene la Policía. A esta altura no es que no me interese, pero a Catalina no la tengo más”, remarcó.
Durante la entrevista, Marcelo manifestó que la joven estudiaba arquitectura y en sus tiempos libres era influencer, algo que la hacía “feliz”. Además, comentó que su esposa siempre les exigía a sus dos hijas que avisaran cuando llegaban a los lugares que iban por miedo a otro tipo de hechos, como que le quisieran robar el celular o el auto.
“Nunca me hubiera imaginado a las 9.30 de la noche que iba a pasar una cosa así y con gente conocida; un horror, una cosa que no se explica; solamente una mente demencial puede haber hecho esto”, apuntó contra Soto.
Y relató sobre cómo se encuentran tras el hecho: “La verdad es que es terrible, nunca me imaginé en mi vida que iba a pasar por una cosa así mi familia, estamos destruidos. Pero un poco por honor a Catalina y a mi hija Lucía que está acá, que nos ayudan para que salgamos adelante”.
En relación con el femicidio, sostuvo: “Es un comentario que nos hemos planteado con Eleonora y con Lucía: cómo se sigue. No hay receta, no hay nada en el mundo que ayude a salir de esto. Yo lo he tomado como que mi hija, que tanto viajaba, salía y tenía tareas, se fue de viaje. La vi un rato temprano, le estábamos instalando un televisor nuevo, estaba contenta porque la hermana tenía y ella no, volví y me encontré con este espanto”.
“Vamos a estar unidos más que nunca con Eleonora y Lucía, que es muy fuerte, la hermana que tanto la amaba, y vamos a ponerle mucha fuerza y a estar más juntos que siempre en todo lo que hagamos”, mencionó sobre el proceso de duelo.
Por último, Marcelo reflexionó: “Tuvo todo lo que quiso y fue feliz con lo que hizo: con la carrera, con su padre, con su hermana, con su novio, con las cosas que le pudimos dar dentro de nuestras posibilidades”.
