En una jornada decisiva para el Gobierno, el Senado buscará definir el futuro de los pliegos de Manuel García Mansilla y Ariel Lijo, los candidatos propuestos por Javier Milei para completar las dos vacantes en la Corte Suprema de Justicia.
La sesión tendrá lugar a partir de las 14 horas, y el panorama es poco alentador para la Casa Rosada debido a que en el Senado prima el rechazo a ambos pliegos. La vicepresidenta, Victoria Villarruel, había otorgado un período de gracia para que el Poder Ejecutivo lograra abrir una negociación que no llegó a buen puerto.
Hasta el momento, la estrategia del oficialismo consistió en boicotear el quorum. Al respecto, fuentes cercanas a la administración libertaria confirmaron a MDZ estar «buscando que caiga la sesión», pero «está muy difícil». Y añadieron: «Todo indica que no evitaremos que haya quórum». Esta estrategia por parte del oficialismo encontró fuertes limitaciones en el Senado. Para concretarla, debía reunir el apoyo total de los bloques dialoguistas, con excepción del peronismo y de Guadalupe Tagliaferri y Martín Lousteau, del PRO y la UCR respectivamente, que impulsaron la sesión y quienes, juntos, suman 36 voluntades, solo a una del quorum para iniciar la sesión, que es de 37.
En cuanto al kirchnerismo, se confirmó la decisión de bajar a los 34 integrantes a dar quórum. El miércoles hubo una reunión de bloque convocada por José Mayans, que contó con 30 presentes. En este marco, la lupa vuelve a ponerse en los gobernadores aliados de Milei, como el catamarqueño peronista Raúl Jalil, que ejerce una fuerte influencia sobre el senador Guillermo Andrada, quien integra la nueva bancada llamada «Convicción Federal», que completan el puntano Fernando Salino, el chaqueño Fernando Rejal y la jujeña Carolina Moisés. Ésta última y Andrada tuvieron votaciones en las que mostraron sus diferencias con el interbloque peronista de José Mayans.
El jefe de bloque de Unión por la Patria manifestó a MDZ: «No alcanza ninguno de los dos pliegos 48 votos. Por el contrario, tienen rechazo de más de 30 votos cada uno de los pliegos», y añadió: «Yo creo que va a haber quórum porque ya está, se agotó el tiempo realmente, y lo agotó el Poder Ejecutivo cuando firmó el decreto violando la Constitución Nacional».
Por su parte, el radicalismo amenazó con presentarse y dar quórum en la sesión si el Gobierno no retira ambos pliegos. La decisión se tomó luego de que el jefe de bloque, Eduardo Vischi, se reuniera con Santiago Caputo y el viceministro de Justicia, Sebastián Amerio, quienes le solicitaron tiempo al bloque radical y rechazaran retirar ambas postulaciones.
Otro de los rechazos a viva voz el del senador cordobés Luis Juez, quien aseguró a MDZ que esperará «a que esté el quórum» y aseguró: «Voy a votar en contra del pliego de Lijo«, a quien consideró «un operador judicial. Yo no creo en los operadores judiciales». En relación al pliego de Manuel García Mansilla, Juez manifestó que es «una discusión abstracta. García Mansilla ya es ministro de la Corte, está en comisión, entró por el artículo 99, inciso 19, es ministro de la Corte hasta noviembre del año que viene y solamente el kirchnerismo lo que quiere es generar un conflicto de características institucionales porque la Corte se va a ver obligada a determinar algo que ya juró».
En este escenario, el último recurso para el oficialismo libertario es el retiro de los pliegos de ambos candidatos, lo que también debería votarse en el recinto, aunque sólo requiere mayoría simple. De abrirse la sesión, los pliegos de Lijo y García-Mansilla tienen pocas chances de sobrevivir. En caso de contar con la presencia de los 72 senadores, 25 votos en rechazo de ambos nombramientos, que serán votados por separado, serán suficientes para bloquear sus designaciones en la Corte. Por ahora, son 30 los senadores dispuestos a bloquear la nominación de Ariel Lijo, mientras que en el caso de Manuel García Mansilla, el catedrático parte de un piso de 40 rechazos. Los candidatos necesitan el voto de los dos tercios de los presentes para obtener la aceptación.