Ezequiel Chavarría no solo ganó la carrera de 21K de Yerba Buena, también logró superar su propia marca obtenida el año pasado.
El atleta tucumano cumplió con el sueño de ganar un de las carreras más importantes del calendario provincial. Dijo estar «contentísimo» por haber logrado su objetivo para el que se preparó a conciencia y durante mucho tiempo.
“Había preparado muy bien esta carrera este año. Dije que quería ganarla y eso es lo que salí a buscar desde el inicio, hasta que llegué acá”, contó.

A la hora de explicar su triunfo reconoció que comenzó fuerte y a ritmo sostenido para lograr ventaja desde un principio y que la pudo sostener aunque hacerlo se significó un gran esfuerzo físico.
La diferencia con el segundo fue de 200 metros, aunque parezca una distancia larga no cree que sea mucha la diferencia y sabe que en estas competencias esas diferencias se pueden acortar si uno se relaja o comete algún descuido.
La carrera convocó a corredores de distintas provincias y del exterior. La organización como siempre fue impecable, hay mucha gente detrás de la logística y todos los detalles están pensados para que los participantes se sientan acompañados y tengan la tranquilidad que todo sale como estaba previsto.
Ezequiel se despidió de la competencia agradeciendo el trato y la amabilidad de todos los organizadores. Le dedicó su triunfo a su madre y a sus alumnos que estaban presentes en la competencia, orgullosos de ver a su profesor triunfar.

Con un participación de más de 400 personas de otras provincias de Argentina y representantes de Brasil, Chile, Colombia y Venezuela entre hombres y mujeres. El evento confirma que el running es una pasión transversal, que sigue sumando adeptos año tras año.