“Ni bien nos enteramos del fallecimiento de ‘Pepe’ Mujica sentimos la responsabilidad, tanto personal como institucional, de venir a traer nuestras condolencias y nuestro respeto a su familia y a todo el pueblo uruguayo”, expresó el referente peronista. Y agregó: “Mujica fue un rioplatense que tenía también su mirada puesta en la Argentina, fue un hombre de consulta y una verdadera referencia para la región: junto a otros líderes muy importantes nos llevaron a pensar de nuevo en la Patria Grande”.
El referente del peronismo aprovechó a cuestionar a Javier Milei, haciendo referencia al Gordo Dan, un referente libertario que escribió “uno menos”, cuando se enteró de la muerte de Mujica: “En nombre mío y de toda la provincia de Buenos Aires pedimos disculpas por los agravios que lanzó uno de los voceros del Gobierno nacional. La mayoría de los argentinos no cree correcto que se celebre la muerte de un líder político de la región, es algo que nos avergüenza tremendamente”.
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Luego Kicillof redobló la apuesta y cuestionó, nuevamente, al líder de La Libertad Avanza, haciendo referencia a su cercanía con Donald Trump: “Hoy lamentablemente hay algunos dirigentes que tienen la mirada puesta en las grandes potencias antes que en los países que transitan una historia similar y tienen un camino común. Sin embargo, en la Argentina lo que predomina es un sentimiento de unidad latinoamericana y de mucho respeto con Uruguay: sabemos que cualquier proyecto nacional requiere, antes que nada, fortalecer los vínculos regionales”.
Finalmente, señaló que “los uruguayos deben estar muy orgullosos de Pepe Mujica, un hombre que trascendió las fronteras y dejó una huella en quienes lo admiramos y respetamos por su trayectoria militante y su palabra llena de sabiduría y, a la vez, de una humildad extraordinaria”.

El dolor de Lucía Topolanski en el funeral de Pepe Mujica en Montevideo
El funeral de Mujica
El velorio del expresidente de Uruguay José «Pepe» Mujica, fallecido el martes a los 89 años de edad, quedó abierta al público este miércoles en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo, la sede del Parlamento en la ciudad de Montevideo. El ritual se extenderá durante 24 o 36 horas, dependiendo de la afluencia de público.
De manera previa, el velatorio estuvo reservado durante algunos minutos al círculo íntimo de Mujica como su viuda, la exvicepresidenta de la República Lucía Topolansky, así como el presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, quien tuvo el impulso de Mujica en su carrera presidencial, entre otras personas.
El féretro de madera, cubierto por una bandera uruguaya y el pabellón de José Artigas, fue trasladado la mañana de este miércoles en un carruaje desde la Plaza Independencia, frente a la antigua sede del Gobierno, seguido a pie en buena parte del trayecto por Orsi y su Gabinete.

En su recorrido por la zona centro de Montevideo, el cortejo pasó por las sedes del oficialista Frente Amplio (FA), el Movimiento de Participación Popular (MPP), sector que fundó Mujica y que es el mayoritario en el FA, así como del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, que en la década de 1960 y 1970 operó como guerrilla urbana liderada también por el exmandatario.
Una vez que el féretro arribó al histórico Palacio Legislativo, Orsi y otras personas del círculo íntimo de Mujica cargaron el ataúd por las escalinatas del histórico edificio. El también expresidente de Uruguay Luis Lacalle Pou (2020- 2025), del ahora opositor Partido Nacional (PN), llegó al velorio poco después de ser habilitada al público y saludó a Topolansky y a Orsi.
Afuera de la sede del Legislativo, una multitud hacía fila para dar su último adiós a Mujica con banderas o retratos del político, quien entre 2010 y 2015 encabezó el segundo Gobierno del FA.
Mujica pidió que sus restos fueran cremados y las cenizas esparcidas en su chacra, ubicada a las afueras de Montevideo, donde murió el martes víctima de un cáncer de esófago. El Gobierno de Orsi decretó tres días de duelo hasta el próximo viernes por el fallecimiento del expresidente, quien en vida se caracterizó por una sensibilidad popular «sin par», al ocupar durante su extensa trayectoria política cargos de relevancia.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, fue este miércoles 14 de mayo al funeral del expresidente uruguayo José ‘Pepe’ Mujica, en el Palacio Legislativo de Montevideo, Uruguay. El mandatario estuvo acompañado por el diputado nacional Hugo Yasky, el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, y el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque.
“Ni bien nos enteramos del fallecimiento de ‘Pepe’ Mujica sentimos la responsabilidad, tanto personal como institucional, de venir a traer nuestras condolencias y nuestro respeto a su familia y a todo el pueblo uruguayo”, expresó el referente peronista. Y agregó: “Mujica fue un rioplatense que tenía también su mirada puesta en la Argentina, fue un hombre de consulta y una verdadera referencia para la región: junto a otros líderes muy importantes nos llevaron a pensar de nuevo en la Patria Grande”.
El referente del peronismo aprovechó a cuestionar a Javier Milei, haciendo referencia al Gordo Dan, un referente libertario que escribió “uno menos”, cuando se enteró de la muerte de Mujica: “En nombre mío y de toda la provincia de Buenos Aires pedimos disculpas por los agravios que lanzó uno de los voceros del Gobierno nacional. La mayoría de los argentinos no cree correcto que se celebre la muerte de un líder político de la región, es algo que nos avergüenza tremendamente”.
Luego Kicillof redobló la apuesta y cuestionó, nuevamente, al líder de La Libertad Avanza, haciendo referencia a su cercanía con Donald Trump: “Hoy lamentablemente hay algunos dirigentes que tienen la mirada puesta en las grandes potencias antes que en los países que transitan una historia similar y tienen un camino común. Sin embargo, en la Argentina lo que predomina es un sentimiento de unidad latinoamericana y de mucho respeto con Uruguay: sabemos que cualquier proyecto nacional requiere, antes que nada, fortalecer los vínculos regionales”.
Finalmente, señaló que “los uruguayos deben estar muy orgullosos de Pepe Mujica, un hombre que trascendió las fronteras y dejó una huella en quienes lo admiramos y respetamos por su trayectoria militante y su palabra llena de sabiduría y, a la vez, de una humildad extraordinaria”.
El velorio del expresidente de Uruguay José «Pepe» Mujica, fallecido el martes a los 89 años de edad, quedó abierta al público este miércoles en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo, la sede del Parlamento en la ciudad de Montevideo. El ritual se extenderá durante 24 o 36 horas, dependiendo de la afluencia de público.
De manera previa, el velatorio estuvo reservado durante algunos minutos al círculo íntimo de Mujica como su viuda, la exvicepresidenta de la República Lucía Topolansky, así como el presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, quien tuvo el impulso de Mujica en su carrera presidencial, entre otras personas.
El féretro de madera, cubierto por una bandera uruguaya y el pabellón de José Artigas, fue trasladado la mañana de este miércoles en un carruaje desde la Plaza Independencia, frente a la antigua sede del Gobierno, seguido a pie en buena parte del trayecto por Orsi y su Gabinete.
En su recorrido por la zona centro de Montevideo, el cortejo pasó por las sedes del oficialista Frente Amplio (FA), el Movimiento de Participación Popular (MPP), sector que fundó Mujica y que es el mayoritario en el FA, así como del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, que en la década de 1960 y 1970 operó como guerrilla urbana liderada también por el exmandatario.
Una vez que el féretro arribó al histórico Palacio Legislativo, Orsi y otras personas del círculo íntimo de Mujica cargaron el ataúd por las escalinatas del histórico edificio. El también expresidente de Uruguay Luis Lacalle Pou (2020- 2025), del ahora opositor Partido Nacional (PN), llegó al velorio poco después de ser habilitada al público y saludó a Topolansky y a Orsi.
Afuera de la sede del Legislativo, una multitud hacía fila para dar su último adiós a Mujica con banderas o retratos del político, quien entre 2010 y 2015 encabezó el segundo Gobierno del FA.
Mujica pidió que sus restos fueran cremados y las cenizas esparcidas en su chacra, ubicada a las afueras de Montevideo, donde murió el martes víctima de un cáncer de esófago. El Gobierno de Orsi decretó tres días de duelo hasta el próximo viernes por el fallecimiento del expresidente, quien en vida se caracterizó por una sensibilidad popular «sin par», al ocupar durante su extensa trayectoria política cargos de relevancia.