El gremio encabezado por Pablo Biró apeló directo a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para denunciar el decreto publicado la semana pasada en el Boletín Oficial. El DNU 340/25 establece nuevas actividades que se someterían al régimen de aquellas que son denominadas como esenciales. Esto consiste en qué, de darse conflictos gremiales y paros de actividad, igual tendrían que mantener una prestación de servicios activa al 50% o 75%, según cada una, de su capacidad. Desde diferentes sindicatos se alzaron las protestas la semana pasada, debido a que entienden que esta es una limitación del derecho a huelga.
Entre todas las actividades mencionadas en el decreto se encuentra la aerocomercial, un sector que ya supo tener sus enfrentamientos con el Gobierno desde el inicio de la gestión. La Asociación Argentina de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) llevó un reclamo a la OIT denunciando «incumplimiento de las normas de libertad sindical«. También se puso sobre la mesa de vuelta el polémico decreto 70/30 del principio de la administración Milei. Aquel decreto, que sigue judicializado, ya establecía un 75% de servicio mínimo a prestar, en el caso del transporte aeronáutico.
APLA también cuestiona el DNU 338/25, también de este año, que flexibiliza el mercado aerocomercial argentino y, dentro de uno de los cambios introducidos, elimina el requerimiento de que las aeronaves de matrícula extranjera sean tripuladas, asistidas y mantenidas solo por personal argentino.
Sin embargo, hace dos semanas nada más, el gremio de Biró pudo cerrar un acuerdo de paritarias con Aerolíneas Argentinas; empresa de cuyo directorio fue echado en octubre del 2024. Con foco en mantener el reciente superávit, se llegaron a cifras con topes de entre 2,5% y 1,3%. Desde la empresa se entiende que esto podría ser otro incentivo para futuros compradores que están a la espera del plan de privatización posterior.
