Todavía las esquirlas del complejísimo cierre de Fuerza Patria están pegando en todos los municipios que pertenecen al peronismo kirchnerista renovador. La pelea por el mensaje, el armado de las listas y los cierres sigue resonando en cada oficina y en las consiguientes tertulias en las que cada uno llega a una conclusión diferente, aunque terminen en un común denominador: “esto está todo roto y no se soluciona más”.
“Hay cuestiones que sobrepasaron todos los límites y actitudes personales sobre las que son imposible recomponer algún tipo de confianza”, le un más que razonable intendente que vivió todo casi como si viera una película de ciencia ficción.
Hoy, otro par suyo, del Movimiento Derecho al Futuro, reveló el estado de ánimo que reinaba en el grupo armado por Axel Kicillof. En el WhatsApp, apareció el primer mensaje de campaña. Habitualmente, se amontonan las felicitaciones y los gestos de aprobación. Parece que desde el sábado algo cambió porque este miércoles, solo un puñado le dieron un like o aprobaron lo publicado entre el casi centenar que observaron la pieza electoral.
Efectivamente, hubo escenas de marcado nerviosismo y acusaciones que sobrepasaron lo ofensivo, aunque la tensión del momento y las actitudes observadas, ameritaba semejante expresividad. Uno de esos episodios se vivió cuando un grupo de negociadores se enteró que Axel Kicillof había aprobado la utilización del partido PARTE para colocar allí a todos sus candidatos seccionales. Inclusive ya habían empezado a ser cargados en la Justicia Electoral cuando aún no habían terminado las negociaciones con el Frente Renovador y La Cámpora.
PARTE es el partido político armado para Alberto Fernández por su amigo Claudio Ferreño y en la provincia de Buenos Aires estaba a cargo del funcionario de la Subsecretaría de Trabajo, regional General San Martín, Manuel Luaces. Oh casualidad, de esa localidad proviene Gabriel Katopodis, propuesto como primer senador provincial por la Primera Sección Electoral.
“Yo no se si estuvo armado o no el apagón en La Plata, pero si no fuera por eso, nos hubiéramos quedado sin lista nosotros, y el kicillofismo ya podía participar en todos lados”, razonaban hoy a la noche un grupo de dirigentes que también estuvieron por La Plata en uno de los dos hoteles que se transformaron en verdaderos comités de campaña de varias listas y varios candidatos.
No hubo piñas, pero si gritos e insultos. Y, sobre el final, arrebatos para meter un legislador aunque su nombre nunca hubiera estado en carpeta. Sin embargo, lo que quedó en claro fueron quiénes estaban dispuestos a jugar con Kicillof en una lista y quienes no. Por eso, además de las relaciones en lo más alto del poder provincial y de Fuerza Patria, lo que se rompió fueron las conexiones de varios referentes y funcionarios entre sí.
Sin tener trascendencia, hay directores y secretarios provinciales y municipales que estando en lugares distinto del armado político, al final del día podían sentarse para negociar o pedir por un proyecto para su municipio. Cuando vieron, por ejemplo, los candidatos anotados en la lista de PARTE, que finalmente no se oficializó, algunos se indignaron porque se enteraron casi de casualidad de que sus habituales “compañeros” estaban a punto de trabajar en un esquema que dejaba a la mayoría sin participar.
La pregunta del millón, que recién hoy algunos se animaron a contestar, tuvo que ver con el quinto lugar, el “candidato Telekino”, que había quedado vacante en la lista inicial y en el que terminó siendo confirmado Leonardo Grosso. En ese lugar el kicillofismo había pretendido ubicar a Alberto Descalzo, a quien le garantizaron que iba a integrar la lista de diputados nacionales. Al faltar la firma de todos los apoderados, la Junta rechazó toda la lista hasta que se enmendara o, en todo caso, los tres designados la aprobasen.
En ese espacio se quejan porque “lo dejaron como candidato en octubre para que trabaje por el resto el mes que viene. Andá a saber en qué lugar lo ubican”, se preguntan con escepticismo los dirigentes que ya saben que en anteriores ocasiones fueron vetados o tachados sin causa más que una animadversión de quien conduce.
“Creo que Alberto saldrá ganando… Porque si firmaba en quinto lugar, como Katopodis iba a ser testimonial, podía asumir, siempre y cuando hiciéramos una buena elección, algo que hoy no está tan claro. Pero, aunque hubiera ido todo perfecto, en dos años lo iban a cag… porque el que estaba de licencia iba a volver por esa banca porque seguramente no será más ministro en 2027”, dijo, agudo, un filoso referente de la sección que mantiene un muy buen diálogo con el ex intendente de Ituzaingó.
“El que juegue a perder, se va a notar, y se carga una cruz para el futuro”, reflexionó otra fuente ante la pregunta del millón. Cómo jugarán algunos que quedaron heridos o fueron desplazados, fundamentalmente en la primera y tercera sección electoral, esa que debe ser fundamental para que a Fuerza Patria espere, con cierta expectativa, los resultados de las restantes seis secciones electorales.