La voz de Javier Milei en la red social X, que en 2024 había mostrado toda su potencia para marcar el pulso de la conversación pública y que elevó al líder libertario como un fenómeno imbatible del ágora digital, comenzó a perder brillo al inicio de este año -a partir del caso $LIBRA- y mostró una pérdida de interacciones en los últimos cuatro meses, con un repunte en los últimos días. En paralelo, el ecosistema tuitero libertario, alimentado por influencers cercanos a la Casa Rosada y por usuarios mileístas con cientos de miles de seguidores, comenzó a exhibir períodos de brazos caídos. La tropa acumuló descontentos con el Gobierno, con hitos como el cierre de las listas bonaerenses, los audios de Diego Spagnuolo o la derrota electoral de septiembre. Por momentos, los militantes enrollaron sus banderas y se retiraron de la plaza online. LA NACION Data rastreó, analizó y extrajo información de las cuentas de X de Javier Milei y de 12 tuiteros afines a él para obtener conclusiones sobre sus posteos e interacciones. Ese trabajo demostró que el vínculo entre Milei y sus seguidores más influyentes en las redes se enfrió. Una muestra de tuiteros libertarios relevantes, que incluye al líder de la militancia digital, Daniel Parisini (alias Gordo Dan), pero también a otros miembros del esquema digital oficial y paraoficial, muestra que estos usuarios cayeron en la consideración de Milei. Si se compara el período que fue de febrero a mayo con el que abarca de junio a la actualidad, se observa que los últimos meses el Presidente retuiteó, citó y les respondió a los referentes digitales en mucho menor volumen. Salvo excepciones, las reacciones del jefe de Estado hacia los mensajes de sus tuiteros más populares cayó, en promedio, un 47%. Algunos que supieron estar en su top ten de usuarios más retuiteados, como @ElPelucaMilei (Tomás Jurado) y @TraductorTeAma (Esteban Glavinich) perdieron ese sitial. Los líderes de opinión libertarios comenzaron a mostrar diferencias con las decisiones políticas que se tomaron en La Libertad Avanza (LLA). Muchos de los tuiteros que siempre habían seguido la línea que se bajó desde la Casa Rosada comenzaron a exhibirse como librepensadores y a deslizar ácidas críticas, desencantados con los armadores del partido que conduce Karina Milei: los Menem, a nivel nacional, y Sebastián Pareja, en la provincia de Buenos Aires.
El análisis de la cuenta de Milei, que tiene 4 millones de seguidores, demuestra que, entre el 1 de junio y el 24 de septiembre, el Presidente mantuvo su ritmo de intervenciones en X, pero la respuesta de sus seguidores se redujo. Sus mensajes perdieron alcance, con una merma de likes, retuits y comentarios. El punto más bajo de su performance en X fue en la primera semana de agosto. La merma se mantuvo hasta mediados de este mes, cuando Milei comenzó a levantar el alcance de sus posteos. Cabe destacar que Milei, comparado con cualquier otra figura política, sigue sosteniendo la centralidad en el territorio digital. Un trabajo de Methodo, una consultora que realiza social listening a partir de un software de escucha con IA y análisis de big data, detectó que en los últimos 12 meses el Presidente acumuló 92 millones de menciones en X, Facebook, Instagram y Youtube. Su principal contrafigura, la expresidenta Cristina Kirchner, apenas superó los 22 millones de menciones. Si se suma a todas las figuras políticas en su conjunto no alcanzan el 50% de las menciones que recibió el Presidente a lo largo del último año. Pero este aspecto cuantitativo no logra explicar completamente el devenir del fenómeno de Milei en las redes: además de perder engagement con sus mensajes vía X, en los últimos meses, la conversación digital sobre Milei creció en negatividad. “Los casos de corrupción, primero $LIBRA y luego Andis, provocaron una genuina y espontánea indignación. Se observa una caída sostenida en su imagen positiva y un significativo aumento de la negatividad. La ciudadanía en las redes decidió darle a su administración el tiempo con que ella misma no contaba para afrontar la angustiante realidad con una única condición: que sostuviera su promesa electoral, combatir a la casta.”, dice el informe de Methodo. Patricio Hernández, politólogo y director general de Methodo, opinó: “Milei fue el verdugo para castigar a la política tradicional y para canalizar las frustraciones con el sistema. Le dieron tiempo hasta el caso $LIBRA, pero a partir de ahí empezaron a mirarlo en HD y a tomar mayor distancia. Con el caso Andis subió notoriamente la negatividad”. Hernández agregó que “la agenda de Milei ya no prende como antes” porque “la realidad se impone”. “El ‘no me alcanza a fin de mes’ circula mucho más que consignas como la motosierra o déficit cero”. AdHoc, otra consultora que se especializa en analizar la conversación digital, exhibió, por caso, que en la última cadena nacional, en la que Milei presentó el Presupuesto 2026, el volumen de la conversación digital descendió un 61% con respecto a la cadena nacional que dio el jefe de Estado el año pasado para presentar el mismo instrumento. La misma consultora, no obstante, rescató un giro en la última semana: el apoyo financiero de la administración de Donald Trump a la gestión de Milei revitalizó a las redes libertarias y logró frenar la tendencia negativa en su imagen observada en los últimos meses. Además, Milei logró redirigir la conservación digital y dominar el marco comunicacional. En el top ten de conceptos vinculados al Gobierno, desaparecieron los relacionados a Karina Milei y el caso Andis, al riesgo país o a la reversión de los vetos presidenciales en el Congreso. Y asomaron otros temas, vinculados al salvataje financiero: “Trump”, “Estados Unidos” y “deuda”, aunque no necesariamente con una valoración positiva del préstamo anunciado por el secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent.
Actividad de los principales tuiteros libertarios
Si se analiza el vínculo de Milei con el ecosistema de tuiteros libertarios, se observa que una serie de acontecimientos provocaron un distanciamiento de la militancia juvenil libertaria con el líder. Hubo períodos de “retirada” y silencio de las tropas oficialistas en X, con una marcada caída en la cantidad de tuits diarios de las principales cuentas oficialistas. Para este trabajo se analizó un corpus de once cuentas representativas de tuiteros libertarios. No todas ocupan el mismo lugar en el ecosistema digital. Están las de aquellos que trabajan en el comando central de la comunicación digital que funciona en la Casa Rosada, donde talla el asesor del Presidente, Santiago Caputo. LN Data contempló las cuentas de Agustín Romo (@agustinromm), Tomás Jurado, (@ElPelucaMilei) y Lucas Luna (@SagazLuna). Otro grupo es el de los streamers, el “grupo Carajo”, representado en el Gordo Dan, Mariano Pérez (@marianoperez912) y Alejandro Surubbi Benítez (@GordoLeyes). Por último, están los tuiteros oficialistas “amplificadores” con alto volumen de seguidores que logran que centenares de cuentas libertarias silvestres los repliquen minuto a minuto. Algunos tienen reporte con el comando central y otros actúan como “átomos sueltos”. Allí se cuentan @TraductorteAma, @TheRealBuni, @ElTrumpista, @TommyShelby_30 y @elpittttt. Las redes de la juventud libertaria fueron un claro reflejo de lo que ocurrió en el palacio, con la interna que se profundizó entre los armadores “karinistas” y los jóvenes de Las Fuerzas del Cielo, la agrupación oficialista liderada por Gordo Dan y Romo, que además es el titular del bloque de LLA en la Legislatura bonaerense. Con el cierre de listas bonaerenses del 19 de julio, que dejó afuera a los candidatos “celestiales”, los “pibes” en las redes hicieron silencio. Y algunos de ellos comenzaron a criticar con crudeza a los armadores partidarios (especialmente a Pareja) por las decisiones de campaña y por la selección de candidatos. Los tuiteros se ocuparon de exponer la pérdida de identidad en las nóminas y exhibieron (publicando sus antecedentes) que muchos de los nombres de la papeleta violeta venían de la “casta”, con un pasado en el peronismo y en el kirchnerismo. En la sala digital libertaria también hubo mutismo con la explosión de los audios de Spagnuolo, que revelaron una supuesta trama de sobornos en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis) y pusieron bajo la lupa el rol de Eduardo “Lule” Menem, armador nacional y brazo político de Karina Milei. Los diez días posteriores a la filtración de los audios la cantidad de tuits cayó a más de la mitad y solo regresó la actividad en los días previos a los comicios provinciales. Pero sin dudas lo que terminó de exhibir la desazón fue la derrota del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires, donde LLA quedó a 13 puntos del peronismo. Las bases mileístas se decepcionaron, no solo por la paliza en las urnas, sino por las decisiones políticas que tomó Milei luego de la derrota. Ellos pretendían una reacción y un recambio en la cúpula partidaria que finalmente no llegó. Uno de los miembros de Las Fuerzas del Cielo aseguró que el descontento subió desde las bases y se hizo inmanejable con tendencias en la red social X como #ParejaRenuncia y #MileiEscuchanos. “La frustración fue incontenible”, definió uno de los “celestiales”. Los tuiteros libertarios no le soltaron la mano a Milei, pero sí le pidieron reacción para que el Presidente hiciera cambios en su equipo. “Al Javo no lo abandonamos porque nosotros somos parte de esto… No somos Chacho Álvarez… Pero no nos pidan que militemos o defendamos a Lule Menem”, dijo a LA NACION uno de los influencers con mayor ascendencia en el ecosistema digital.
Milei tuvo un distanciamiento del grupo de libertarios en X
Milei también tomó mayor distancia del grupo de tuiteros libertarios. Salvo el caso de @GordoLeyes, con el resto de los influencers el líder libertario interactuó mucho menos en los últimos meses. Si se compara el período de febrero a mayo con el que va de junio a septiembre, se ve que todos los líderes de opinión juveniles fueron menos retuiteados. La mayor caída la tuvieron Romo, @therealbuni y @elpittttt. Otro usuario, @TommyShelby_30, que supo integrar el top 5 de más retuiteados por Milei, tuvo una merma del 26%. Y el Gordo Dan registró una caída del 32% en los retuits de Milei. Es que Parisini, principal líder de opinión de la tropa, comenzó a oscilar el último mes. Quiso “volver a las bases” y representar el sentir de su público sin desertar como un soldado del Presidente. Tuvo un primer quiebre con la Casa Rosada cuando publicó un mensaje grosero sobre la hija del senador cordobés Luis Juez, Milagros -que tiene parálisis cerebral- y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, salió en el canal TN a advertir que él no formaba parte del Gobierno. A partir de ese momento, Dan advirtió que comenzaría a pronunciarse como un libre pensador. “Acepten mi fantinización. No soy parte del Gobierno”, dijo en alusión al rol que ocupa Alejandro Fantino, un comunicador ultraoficialista con juego propio. Parisini, que asistía a diario a Balcarce 50, prácticamente dejó de pulular por los pasillos de la sede de gobierno. La madrugada posterior a la elección en la Provincia, el influencer dijo, sin pelos en la lengua, lo que pensaba sobre los armadores de LLA: “Lule Menem y Pareja, si tienen huevos, deberían dejar de usar de escudo humano a Karina Milei y dar un paso al costado en honor a la Sagrada Causa de la Libertad que lleva adelante el presidente Javier Milei. Por los 47 millones de argentinos y por el futuro de los que aún no nacieron”. Frente al micrófono de Carajo, luego Dan bajó la espuma y anunció que pondría “todo para ganar en octubre”. “Hablé bastante. Dije todo lo que pasaba tanto de manera externa como de manera interna. Me consta que el mensaje llegó. De ahora en más les propongo no estar llorando porque ya están echadas las cartas y se juega el futuro del país”, soltó.
Milei, sin embargo, luego lo desconoció como un primus inter pares de su tropa. En una entrevista con La Voz del Interior el Presidente dijo que Dan es es «uno más” de sus “12 millones de seguidores»: “No me tengo que hacer cargo de lo que dicen mis seguidores. Soy liberal, acúsenme por las cosas que yo dije. Si quiere saber qué opina uno de mis seguidores, se lo pregunta a él”, afirmó. En Las Fuerzas del Cielo creen que reforzar la independencia de algunos líderes tuiteros ayudará a canalizar descontentos y a contener a la juventud militante digital que reclama resucitar el espíritu “anticasta”. “El Gordo no va a ser siempre indulgente y nosotros no podemos decir que es bueno el Nene Vera”, dijo uno de los celestiales en alusión a uno de los punteros territoriales de LLA. No está claro cómo seguirá el vínculo entre Milei y sus referentes digitales. En el Gobierno no descartan que, en lo que queda de la campaña al 26 de octubre, Milei quiera volver a rodearse de esa militancia original para replicar las postales del 2023 que lo llevaron a la Presidencia.
Variación de la imagen de Milei
Evaluación de las menciones totales sobre el Presidente en las diferentes redes sociales
Menciones sobre Milei sin contemplar su ecosistema digital
En el terreno digital, no obstante, el Presidente sufre un impacto cuando el ecosistema de tuiteros se apaga. El informe de Methodo apunta: “Los silencios del ecosistema digital en el que Milei se apoyó durante su surgimiento como figura pública nos lleva a preguntarnos qué es lo que sucede genuinamente en las redes sociales cuando no contemplamos las interacciones de su círculo de influencers, funcionarios o medios afines”. El estudio de esta consultora digital muestra que si entre octubre y diciembre de 2024 Milei tenía un 61% de imagen positiva y un 39% de imagen negativa, esa tendencia se revirtió en 2025 y se profundizó en los últimos meses: en julio y agosto el Presidente tuvo un 41% de imagen positiva y un 59% de negativa. La tendencia se agrava fuertemente si no se contempla al ecosistema de usuarios afines al Gobierno: entre las cuentas no libertarias, Milei tiene 83% de imagen negativa y 17% de positiva. El repunte que exhibieron en la última semana varios de los indicadores digitales a partir de que se oficializó el salvataje financiero de los Estados Unidos muestra que cuando el ecosistema de tuiteros mileístas se entusiasma, la cancha digital se vuelve a nivelar.
