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Brigitte Macron: empezó el juicio a los acosadores que afirman que es un hombre

Brigitte, la primera dama francesa, y el presidente Emmanuel Macron han decidido poner fin a la teoría de la conspiración que sostiene que ella es un varón. Llevaron este lunes a juicio a diez personas ante el tribunal de París, quienes se han transformado en sus acosadores en las redes sociales.

Tras años de silencio, la pareja Macron quiere frenar la oleada de información falsa que se está difundiendo sobre la identidad sexual de la primera dama.

Este lunes 27 y el martes 28 de octubre, diez personas comparecerán ante el tribunal de París por haber publicado o compartido en redes sociales chistes, insultos, fotomontajes y otras caricaturas que afirman que Brigitte Macron es, en realidad, un hombre.

Estas personas son sospechosas de hacer numerosos comentarios maliciosos sobre el «género» y la «sexualidad» de Brigitte Macron, equiparando la diferencia de edad con su marido con «pedofilia», según la Fiscalía de París.

Entre los acusados se encuentra Aurélien Poirson-Atlan, más conocido como «Zoé Sagan» en Facebook y X, donde fue, durante años, uno de los principales vectores de este rumor.

Esta teoría surgió tras la victoria de Emmanuel Macron en las elecciones presidenciales de 2017. Desde entonces, ha seguido creciendo gracias a la intervención de trolls que afirman que Brigitte Macron ha experimentado una transición de género.

Para ellos, es la misma persona que su hermano, Jean-Michel Trogneux. «Un día, Brigitte descubrió que alguien había cambiado en su recibo de impuestos su nombre por el de Jean-Michel Trogneux, que es su hermano», según un documental que se proyectó el domingo en Francia.

Varias figuras conocidas del mundo de la conspiración francesa han difundido ampliamente este rumor. Uno de ellos fue Xavier Poussard, quien, a partir de 2021, publicó artículos en el boletín mensual Faits & Documents, dirigido por personas cercanas al polemista antisemita Alain Soral.

Natacha Rey, que se describe a sí misma como una «periodista independiente autodidacta», colaboró con el equipo editorial. También difundió la noticia falsa, con fotos y documentos de apoyo, en un video publicado en 2021, en la cuenta de YouTube de una supuesta médium, Amandine Roy (nombre real Delphine Jégousse).

En cuestión de horas, su programa había acumulado cientos de miles de visualizaciones. Ambas mujeres también están siendo demandadas por la primera dama y su hermano, el verdadero Jean-Michel Trogneux.

Estas noticias falsas adquirieron una nueva dimensión cuando, en marzo de 2024, la influencer pro-Trump, Candace Owens, se convirtió en la portavoz de este rumor al otro lado del Atlántico. El caso fue enorme entre los MAGA, seguidores de Donald Trump.

La estadounidense de 36 años, que denuncia «el mayor escándalo político de la historia de la humanidad», también apoyó la labor de Xavier Poussard. Escribió el prefacio de su libro de investigación, Becoming Brigitte, publicado en febrero pasado.

En este libro, el teórico de la conspiración, que ahora reside en Milán, cuestiona la edad del presidente cuando conoció a su esposa. Según él, tenía 14 años, no 17, como se presenta en la «historia oficial».

Ante este permanente hostigamiento, los Macron decidieron actuar atacando a todos aquellos que difundieron el rumor, algo poco común para un presidente. Y para acallar los rumores, se presentarán pruebas «científicas» y fotos en el juicio de Candace Owens en Estados Unidos, contra quien la pareja presidencial presentó una denuncia en julio de 2025.

Los Macron están hartos de soportar esta historia, que se originó cuando se inició su romance en el colegio donde ella era profesora de literatura y drama y él, un alumno de la edad de sus hijos en Amiens, una ciudad de provincia en el norte de Francia. Macron fue enviado a París por sus padres a estudiar.

«No voy al extranjero sin que alguien hable de ello. No hay esposa de jefe de Estado que no lo sepa», dijo Brigitte Macron, que no oculta su cansancio.

A media tarde del 2 de diciembre de 2024, Brigitte fue interrogada por un investigador y el jefe de la Brigada para la Represión de los Delitos contra las Personas (BRDP) sobre el ciberacoso del que ha sido víctima durante varios años. Siendo la discreción imprescindible, los dos policías judiciales parisinos se desplazaron al Palacio del Elíseo para interrogar a la primera dama.

A finales del verano, decidió presentar una denuncia en respuesta a los ataques y rumores difundidos en X sobre su presunta identidad transgénero.

«Los mismos temas odiosos siguen saliendo a la luz. Es una reescritura de mi historia familiar. Hay amenazas y comentarios insostenibles. Dicen que mentí sobre mi estado civil. Hay diferentes teorías o versiones, que cambian con frecuencia. Pero la conclusión es que soy un hombre», resume la esposa del presidente de la República.

Diez meses después de esta entrevista en el palacio presidencial, diez presuntos acosadores —ocho hombres y dos mujeres— comparecerán este lunes y el martes ante el Tribunal Penal de París. Los acusados, de entre 41 y 60 años, provienen de diversos orígenes: un galerista, un profesor, una médium, un informático, un desempleado e incluso un funcionario electo de un pequeño pueblo de Borgoña.

A lo largo de sus investigaciones, los investigadores del BRDP descubrieron tuits y fotomontajes que hacen referencia a ellos. «¿Tenemos un primer ministro homosexual y una primera dama transexual, no veo cuál es el problema?», escribió uno de los sospechosos en junio de 2024.

«Para su información, Brigitte Macron es una pedófila que nunca ha comparecido ante la justicia», tuiteó un hombre de unos cincuenta años, residente en Tarbes (Altos Pirineos) en agosto de 2024.

Uno de los ataques consistía en afirmar que Brigitte Macron y su hermano Jean-Michel Trogneux eran la misma persona y que, por lo tanto, este último se había sometido a un cambio de sexo.

Durante su detención policial, algunos siguieron planteando estas teorías. «No puedo decir que no sea una mujer, como tampoco puedo estar seguro de que no sea un hombre», respondió uno de ellos.

Todos niegan el acoso. Entre los acusados se encuentra Delphine J., alias «Amandine Roy», quien ya ha sido objeto de dos juicios por delitos similares. Condenada en primera instancia, fue absuelta por el Tribunal de Apelación en julio. Brigitte Macron ha apelado desde entonces.

«Para mí, es una absolución para todos», declaró Maud Marian, abogada de Delphine J., argumentando que «hay un uso indebido de la ley de prensa» y que el concepto de «deterioro de las condiciones de vida» no se ha definido con claridad.

Sin embargo, esta lucha por la verdad no está exenta de dificultades. Si bien Natacha Rey y Amandine Roy fueron condenadas por difamación en primera instancia durante un primer juicio (que no es el que comenzó este lunes en París), fueron absueltas en apelación el 10 de julio.

Para rastrear a los autores, los investigadores «se pusieron en contacto con plataformas X o Facebook», explicó Alexandre Archambault, abogado especializado en derecho digital. Es muy fácil para estas plataformas rastrear la identidad de una cuenta anónima «a través de su dirección IP o número de serie del ordenador», explicó.

Por lo tanto, se llevaron a cabo tres oleadas de arrestos en toda Francia en diciembre de 2024 y, posteriormente, en febrero y marzo de 2025.

Estas oleadas resultaron en la detención de once personas, diez de las cuales son juzgadas desde este lunes. Una cifra que parece bastante ridícula dada la amplia difusión de esta información falsa. En redes sociales, se cuentan por cientos los nombres de usuarios que se burlan del género y la sexualidad de la primera dama.

En cualquier caso, el ciberacoso es un delito castigado con hasta dos años de prisión. Para obtener una condena, la Fiscalía deberá demostrar si la salud mental de Brigitte Macron se vio afectada, explica Alexandre Archambault.

La primera dama se negó a una evaluación psiquiátrica. Sin embargo, «un simple certificado de cualquier médico podría ser suficiente», señala Alexandre Archambault.

Esto no ha impedido que la primera dama se sienta molesta por este contenido malicioso, como asegura su entorno.

A pesar de una posible condena, Brigitte Macron espera que este ciberacoso cese y que los acusados sean expulsados de las redes sociales, según una fuente cercana al caso.