El Parque Nacional Iguazú, en la provincia de Misiones, y el Área Cataratas recibieron la Navidad con el arribo del turista número 1,5 millones en 2025, según el informe del Ministerio de Turismo de la provincia de Misiones.
Con este número, las Cataratas del Iguazú se ratifica como uno de los destinos naturales más demandados del continente y funciona como termómetro de la recuperación sostenida del turismo en la región, con un perfil de demanda cada vez más diverso.
Un dato central aportado por el ministro de Turismo de Misiones, José María Arrúa, al portal Economis.com.ar permite dimensionar mejor el impacto económico del récord: el 30% de esos 1,5 millones de visitantes corresponde a turistas extranjeros. Esto implica que alrededor de 450.000 viajeros internacionales eligieron Iguazú en 2025, una cifra de enorme relevancia para la generación de divisas, el empleo turístico y la actividad comercial en la frontera norte del país.
Roberto Enríquez, CEO del concesionario Iguazú Argentina, destacó el crecimiento sostenido del segundo semestre, “con un aumento del 20% interanual, que permitió superar la cantidad de visitantes de los últimos cinco años y posiciona a Cataratas y a Misiones como uno de los destinos más importantes del país”.
La afirmación refuerza que el récord de 2025 es el resultado de una tendencia de demanda en alza, mayor conectividad, mejora en servicios y una experiencia que sostiene altos niveles de retorno y recomendación.
A este desempeño se suma la lectura política y de gestión que hizo Leo Lucas, presidente del Ente Turismo de Iguazú, quien destacó el carácter estructural del crecimiento. “La llegada del turista 1,5 millones al Parque Nacional Iguazú en 2025 es el reflejo de un trabajo sostenido durante todo el año, construido con fuerte compromiso conjunto entre el Ministerio de Turismo, el municipio de Iguazú y el sector privado. Cuando trabajamos unidos, los resultados llegan y se transforman en más oportunidades para nuestra gente”.
La afirmación resume una de las claves del actual ciclo turístico: la articulación público-privada como motor de competitividad, inversión y empleo en uno de los destinos más internacionalizados de la Argentina.
El récord absoluto había sido en 2019, con 1.635.237 ingresos, en el último año previo a la disrupción sanitaria global. Tras el quiebre de 2020, cuando la operación quedó condicionada por la pandemia, el 2021 pospandemia cerró con 513.567 visitantes, reflejo de un turismo todavía en modo de reapertura.
En 2022 volvió a ubicarse en niveles altos con 1.503.834; 2023 sostuvo el ritmo con 1.508.776 y 2024 mostró una baja con 1.331.641 ingresantes.
En 2025 vuelve a afirmarse en el umbral de 1,5 millones, lo que implicó un repunte del 12,6% frente a 2024 y deja al destino a solo 135.237 visitantes (8,3%) de igualar la mejor marca de 2019.
Detrás del número anual hay un dato estructural para el mercado: el flujo combina turismo nacional (incluyendo misioneros y viajeros de distintas provincias) con un aporte relevante de visitantes regionales, en especial del Mercosur, además del segmento internacional. Esta diversidad amortigua la volatilidad típica de los ciclos económicos y refuerza la capacidad del destino para sostener ocupación, actividad gastronómica, transporte, excursiones y comercio, incluso fuera de picos estacionales.
El 2025 se apoya en una agenda de mejoras de infraestructura y mantenimiento orientada a preservar la experiencia y el activo ambiental: refuerzo de senderos, áreas de descanso y servicios, con foco en seguridad, ordenamiento de flujos y calidad de visita. En la ecuación de un destino de escala global, ese punto es decisivo: más visitantes exige más gestión para evitar el deterioro del recurso y sostener estándares.
Según se especifica desde el Ministerio de Turismo de Misiones, este año fue clave la recuperación del circuito Garganta del Diablo, afectado por la creciente de 2024. La habilitación plena de los paseos se complementa con la proyección de un nuevo balcón a Garganta y una nueva línea del tren ecológico para hacer más fluida la circulación de los visitantes, diseñados por el concesionario Iguazú Argentina, que lidera el empresario misionero Roberto Enríquez.
Con 1,5 millones de ingresos ya alcanzados en Navidad, Iguazú cierra el año con una señal potente para inversores y operadores: demanda robusta, capacidad de recuperación y una base regional que sostiene el negocio. Y, a la vez, deja planteado el próximo objetivo competitivo: volver a disputar, y eventualmente superar, el techo histórico de 2019.
Desde el pasado 1° de diciembre rige el horario de verano en el Parque Nacional Iguazú. El acceso al Área Cataratas del Iguazú se encuentra habilitado todos los días de 07:00 a 18:00, incluidos feriados, y se mantendrá vigente hasta el 28 de febrero de 2026, en el marco de una temporada que ya muestra indicadores de fuerte crecimiento.
La extensión horaria apunta a mejorar la experiencia de los visitantes durante los meses de mayor afluencia, optimizando la circulación, el uso de los servicios y el disfrute del entorno natural, en un contexto de demanda turística en alza.
A partir de las 08:00 horas, los comercios del área comienzan a funcionar a pleno, acompañando el flujo turístico. Asimismo, las excursiones náuticas, los servicios de guías, fotógrafos, propuestas gastronómicas y el transporte interno adecuaron su operatoria a este esquema horario, ofreciendo una cobertura integral durante toda la jornada.
Año | Visitantes
- 2019 | 1.635.237
- 2020 | —
- 2021 | 513.567
- 2022 | 1.503.834
- 2023 | 1.508.776
- 2024 | 1.331.641
- 2025 | 1.500.000
