La Rural de Palermo se vistió de verde desde este viernes. ¿El motivo? Dar comienzo por tercer año a la Expo Cannabis. Esta nueva edición sorprende con una gran novedad: por primera vez se pueden degustar helados artesanales cannábicos.
Vainilla, chocolate, sambayón, dulce de leche y americana son los sabores de los helados que la empresa argentina Cannacream regala en el stand 191. La clave del producto es que contiene terpenos naturales, pero no cannabinoides, es decir no tienen THC ni CBD.
«Cada gusto es desarrollado con el perfil de distintas plantas aromáticas, las cuales tienen elementos del limón y del pino, entre otros», dice uno de los creadores de la compañía, Fernando Diez. Desde junio desarrollan este producto en la fábrica de helados Serbet, ubicada en Aldovonsi, La Matanza.
Los terpenos le dan a las plantas una característica importante: tener aroma y sabor. Lo definen como si fuese «un perfume». Además, constituyen la mayor parte del aceite esencial producido por las plantas aromáticas. Se pueden sumar a productos comestibles, bebidas, cremas y aceites corporales.
«Los expertos extraen los terpenos de la planta de cannabis; luego se saca el ADN y se reproduce para hacer extractos naturales», explica Pablo Sandoval, otro de los socios. Otra versión del helado cannábico para probar en la Rural
Al lado de cada sabor tradicional de helado figura la planta que le dará un gusto y color especial. La empresa ofrece dos tipos de americana que no tienen nada que ver con el color (porque los tiñen) y sabor originales (porque le agregan terpenos).
Una americana cuenta con terpenos de Holy Grail Kusk, tiene sabor dulce y dejos de pino, y su color es verde. Mientras que la otra americana es violeta y el terpeno le da sabor cítrico como el limón, dulce como el mango y una nota de pino.
El proceso de elaboración de estos helados cannábicos es igual al artesanal. «Se pasteuriza, llega a una temperatura de 80 grados y una vez que están todos los componentes pasteurizados se baja a 45 grados para agregarle la crema», explica Joan Santos, uno de los socios y responsable de la fabricación.
Y dice: «Luego de que está todo incorporado le sumamos los gustos y los terpenos, para que el producto tome el sabor que buscamos». A continuación se lo deja macerar de cinco a 24 horas.
La cantidad de terpeno depende del sabor original del helado. «Un sambayón por kilo puede llevar casi un cuarto de mililitro de terpeno porque tenés que hacerlo resaltar mucho más que en una americana, dado que no compite con el alcohol», sostiene Diez. Explicaciones en un stand de la expo
En países como Estados Unidos y Canadá es común la venta de helados con terpenos. Pero todavía en Argentina no está regulado. «Necesitamos importar los terpenos de la empresa Cali, desde España, a través de SENASA o ANMAT», explica Pablo Cuánto, uno de los socios de la heladería.
Esta excepción que se da en la expo hizo que el stand de los helados cannábicos fuera una de las vedettes y allí puede verse cómo se forman largas colas para poder degustar de manera gratuita alguno de los sabores disponibles.
Y aclara: «El único producto que tiene autorización acá para comercializar una bebida con terpenos es Champannabis, que está en Mendoza, y desde diciembre comenzará a comercializar y exportar». En este caso importaron los terpenos de Cali con autorización de la ANMAT, es decir, que es la única bebida legal de este tipo para vender en Argentina. Lo mismo busca lograr Cannacream con sus helados cannábicos.
Semillas, plantas en vivo y charlas renovadas
Esta edición de la expo también trabajó un cambio legislativo clave para la industria y el consumo de la planta de marihuana. Desde este viernes, el comercio de semillas de cannabis quedó formalmente regulado y habilitado en Argentina tras la ceremonia que se realizó en el evento.
El secretario de Agricultura de la Nación, Juan José Bahillo, entregó los primeros certificados de titularidad de las variedades de cannabis registradas. La cooperativa semillera Criar fue la primera en obtener su matrícula como criadero para crear nuevas variedades de semillas y clones. «Proponemos genética nacional y semillas frescas», sostiene Facundo Rivadeneira, integrante de Criar.
Tienen el criadero en un departamento de oficinas en el barrio porteño de Congreso. «Contamos con dos salas, una de producción y una de propagación. Les podremos vender semillas a una empresa del Estado o privada, también los usuarios del REPROCANN podrán acceder a ellas», aclara. Además, destaca que «desde este viernes los grow shop y viveros registrados van a poder vender semillas y esquejes».
El evento está lleno de «primeras veces». Tal es así que expertos del CONICET trajeron plantas y explican sus propiedades en vivo. Las personas hacen fila para poder ver con un microscopio un corte de la planta y hacerle consultas a los investigadores. Plantas de cannabis para ver por el microscopio
«Nos enfocamos en que las personas tengan contacto con la planta en esta edición. Haremos muestras y análisis de aceites para saber si es verdad lo que dicen tener o no», afirma Fresia Melina Silva Sofrás, doctorando en Química Analítica de cannabis.
Como todos los años, profesionales de la salud dan charlas sobre la planta. En esta oportunidad, se hablará por primera vez del vínculo existente entre el cannabis y la diabetes, y cómo la planta puede incidir positivamente en la enfermedad.
«Se investiga el potencial uso de la planta de cannabis para las personas con diabetes. La combinación de CBD y THCV (tetrahidrocannabivarina) podrían mejorar el metabolismo glucémico, que regula la glucemia en la sangre, así como también el metabolismo del colesterol», sostiene la médica especialista en nutrición con orientación en diabetes Gisela Medrano.
Este sábado dará a conocer en la charla estudios que piensan en el cannabis como posibles herramientas terapéuticas para la diabetes tipo 2, generalmente asociada a la obesidad.