La Municipalidad de San Miguel de Tucumán, a través de su Dirección de Salud Ambiental, realiza periódicamente operativos para bregar por el cumplimiento de la ordenanza 4247/2010, que prohíbe la generación de ruidos molestos en el ámbito de la capital. Como resultado de estos controles, que comenzaron a realizarse con la nueva gestión, la repartición ya realizó más de 300 actuaciones, lo que incluye la clausura de locales y la formulación de actas de comprobación, en el caso de domicilios particulares.
“Por indicación de la intendenta Rossana Chahla y de la secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Julieta Migliavacca, estamos trabajando para ponerle límites a la contaminación acústica, que es la generación excesiva de ruido, que resulta perjudicial para la salud de las personas, ante lo cual el Municipio actúa”, explicó la directora de Salud Ambiental, Clara Saslaver.
La funcionaria indicó que “para hacer cumplir la ordenanza 4247, que es del 2010, en la actual gestión ya se hicieron más de 300 actuaciones, con clausuras de bailes, eventos deportivos y otros locales, además de actas de comprobación en casas particulares donde se generan estas contaminaciones sonoras y también en industrias”.
Saslever explicó que el máximo permitido para que un sonido no sea considerado como ruido molesto es de 65 decibeles. “Si se supera ese límite, ya se trata de una contaminación sonora no permitida”, precisó.
La Directora de Salud Ambiental recordó que “en las grandes ciudades, como San Miguel de Tucumán, se genera una gran contaminación acústica y el objetivo con estas acciones es disminuirla, debido a que los ruidos molestos traen aparejados muchos problemas para la comunidad e impactan negativamente en la salud de las personas, causando problemas como el estrés, insomnio o falta de concentración”.
Saslavar informó que los vecinos pueden denunciar ruidos molestos de manera presencial, de lunes a viernes, de 8 a 13, en la sede de la Dirección, que está ubicada en Alberdi 230, o a través de la línea de WhatsApp 3812230563, de Atención al Ciudadano, a los fines de que el Municipio pueda actuar. “Nosotros tenemos un grupo de sección Contaminantes, donde contamos con inspectores que realizan los operativos, siguiendo con una hoja de ruta donde se va dando respuestas a los pedidos de los vecinos, a veces con el acompañamiento de la Policía”, acotó.
Por otro lado, la funcionaria dijo que “cada vez son más los vecinos que hacen llegar sus denuncias, tanto por ruidos molestos en casas como en otros espacios, como bailes, eventos o gimnasios, en algunos casos de manera individual y también en grupos de personas que deciden actuar ante estas situaciones”.
Saslaver aclaró que “en el caso de eventos y locales comerciales, cuando se constata una contaminación sonora se procede a la clausura, mientras que en los casos de domicilios particulares se abren instancias de conciliación para lograr un arreglo entre los propios vecinos”.
La directora de Salud Ambiental aclaró que “las denuncias de estos casos se dan todos los días de la semana y a toda hora, ya que, por ejemplo, hay gimnasios que funcionan todos los días y producen ruidos excesivos durante el día”.
Para finalizar, la funcionaria dijo que “la Dirección está haciendo hincapié en la prevención, concientizando a los vecinos sobre la importancia de respetar el espacio de los demás y no producir ruidos molestos, porque esto trae muchos problemas a la salud de las personas”.