Un día después de los violentos enfrentamientos durante una asamblea estudiantil, la Universidad Nacional de Quilmes dio su versión de los hechos: denunció que infiltrados libertarios provocaron los incidentes y que utilizaron gas pimienta. «En 35 años de trayectoria de la UNQ, es la primera vez que se viven hechos de esta violencia», aseguraron desde la institución.
El episodio tuvo lugar el lunes en plena toma de la Universidad de Quilmes, donde los estudiantes y docentes protestan contra el veto de Javier Milei a la ley de financiamiento universitario. Un grupo de libertarios intentó participar de una asamblea en ese centro de estudios, pero fueron corridos por estudiantes.
En los videos se vieron escenas de golpes de puño, otras agresiones y hasta a una persona arrojarle al grupo un tacho de basura cuando salían del edificio. Los libertarios denunciaron que hubo múltiples heridos.
Este martes, la Universidad de Quilmes publicó un descargo en su página web y en sus redes sociales. Allí, respaldaron la versión que dieron los estudiantes de izquierda, Franja Morada y del kirchnerismo que participaban de la toma: afirmaron que los libertarios no forman parte de la institución, arrojaron gas pimienta y provocaron los incidentes.
«Repudiamos el accionar intimidatorio y agresivo de militantes de La Libertad Avanza que no pertenecen a la comunidad universitaria», sostiene el comunicado, titulado como «La verdad de los hechos: la agresión a los estudiantes de la UNQ».
Los libertarios quisieron participar en una asamblea. Los acusan de haber tirado gas pimienta. Les lanzaron un tacho de basura cuando los empujaron para que se fueran.
En el descargo, publicaron fotos de los supuestos agresores y dieron su versión de los hechos.
«Alrededor de las 19 hs comenzó una Asamblea en la que las y los estudiantes decidirían el futuro de las medidas de fuerza a tomar durante esa noche y los días venideros. A minutos de comenzar, irrumpieron militantes de La Libertad Avanza que no son estudiantes de nuestra Universidad, con un megáfono interrumpiendo el cauce habitual de ese tipo de reuniones«, indicaron las autoridades de la UNQ.
También aclararon que «se les pidió amablemente» que abandonaran la asamblea para que los «estudiantes, docentes y no docentes» siguieran dialogando «pacíficamente».
En ese momento, sostiene la Universidad de Quilmes, «los militantes de LLA comenzaron a agredir a los más de 500 concurrentes y ante su salida arrojaron gas pimienta en un espacio cerrado, que afectó a gran parte de los presentes».
Al respecto, detallaron que «hubo estudiantes que debieron ser atendidos y otros y otras estuvieron afectados por horas».
Desde la UNQ mostraron el cartucho de gas pimienta, que resguardaron los estudiantes y cuya trazabilidad «es de fácil rastreo para la Justicia».
Además, publicaron un video de siete segundos del grupo de estudiantes yéndose del edificio. En esa grabación se ve a un hombre de pelo y barba rojizas y anteojos oscuros lanzar el gas pimienta. Otra persona, de buzo verde, reacciona y se abalanza sobre él para detenerlo.
«Esa misma persona estuvo en la puerta de Télam solicitando el cierre de la agencia estatal y es quien, minutos después de arrojar el gas, se fotografió en las inmediaciones de nuestra Universidad fingiendo haber sido agredido«, dijeron desde la Universidad sobre los supuestos antecedentes de uno de los libertarios. Sobre el grupo, indicaron que estuvieron apostados en la sede «como si fuesen ‘guardias de seguridad'».
En el descargo también vinculan al grupo de libertarios con una concejal de Quilmes, Estefanía Albasetti (La Libertad Avanza).
«Ellos mismos admitieron no ser estudiantes y aparecieron luego en televisión junto a Albasetti victimizándose. Se trata de la misma concejal que amenazó el 25 de septiembre último en redes sociales, antes de la segunda marcha universitaria del 2 de octubre: ‘no lleven niños porque vamos a repartir palo y gas pimienta'».
La Universidad de Quilmes cerró su comunicado con un repudio sobre los episodios de violencia.
«En 35 años de trayectoria de la UNQ, es la primera vez que se viven hechos de esta violencia. Justamente, suceden el mismo día en el que personas ajenas a la institución, y que posteriormente se identificaron como relacionadas a la concejala local Estefanía Albasetti, desembarcaron en la Universidad. Que cada persona saque sus propias conclusiones», concluyeron desde la Universidad de Quilmes.