Jean-Marie Le Pen, líder histórico de la ultraderecha en Francia, murió este martes a los 96 años, según confirmó su familia a través de un comunicado.
El fundador del Frente Nacional llevaba varias semanas ingresado en un centro de cuidados por su débil estado de salud, falleció al mediodía «rodeado de su familia», reza el comunicado.
En un mensaje en su cuenta de X, Jordan Bardella, el presidente de la Agrupación Nacional (RN), el nombre que tomó el partido en 2018, anunció su muerte y le rindió homenaje al destacar que Jean-Marie Le Pen «sirvió siempre a Francia, defendió su identidad y su soberanía».
La noticia tomó por sorpresa a su hija y sucesora de su obra política, Marine Le Pen, que se encontraba de vuelta a París desde el archipiélago francés de Mayotte, en el Índico, que fue informada por los periodistas, indicó un enviado especial de France Info que viajaba con ella en el avión.
Le Pen, una figura divisiva en la política francesa, era conocido por su retórica combativa contra la inmigración y el multiculturalismo, que le valió tanto fervientes seguidores como una amplia condena. Sus declaraciones controvertidas, como la negación del Holocausto, le supusieron múltiples condenas y tensaron sus alianzas políticas.
El líder de ultraderecha, quien una vez llegó a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 2002, finalmente se distanció de su hija, Marine Le Pen. En 2011, ella renombró el partido para deshacerse de su imagen “demonizada” y ampliar su atractivo electoral, lo que le valió sus propios éxitos electorales. Ahora se llama Agrupación Nacional.
A pesar de su exclusión del partido en 2015, el legado divisivo de Le Pen perdura. El líder ultraderechista marcó décadas de la historia política francesa y moldeó la trayectoria de la extrema derecha.