Durante la pandemia y para preservar la distancia social necesaria para prevenir los contagios de covid, en todo el país se implementó una medida que fue permitirle a los bares y restaurantes a ocupar parte de la vía pública con decks para ampliar los espacios disponibles para los comensales y parroquianos.
Pasada la pandemia quedaron funcionando, pero ahora se puso en revisión esa medida. En el caso de San Miguel de Tucumán se está realizando un relevamiento para saber cuantos decks hay instalados y en qué lugares. La idea es ir de a poco desarmándolos y liberar los espacios ocupados para vuelvan a tener el sentido original que es para disfrute de toda la sociedad.
El Director de vía pública Juan Rojas manifestó “estamos estudiando cada caso. Cuatro decks ya están listos para ser retirados, y otros ocho presentan problemas significativos. Esta decisión responde a las solicitudes de los vecinos, ya que muchos de estos espacios obstruyen el tránsito”.
Sin dudas la autorización tuvo un buen objetivo y cumplió la misión que se habían propuesto en su momento las autoridades, pero hubo casos donde se abusaron y además de los decks se colocaron macetas u otros elementos decorativos reduciendo el espacio público más de lo estrictamente necesario.
Actualmente, la ciudad cuenta con 160 bares registrados, de los cuales 36 poseen decks.
Desde el municipio capitalino dejaron trascender que no solo se controlarán los decks sino que además se lleva a cabo una inspección para saber si los bares y restaurantes tienen las mesas y sillas autorizadas, o por el contrario aprovecharon aquel momento para incrementarlas.
Lo que está realizando la municipalidad es un ordenamiento de los espacios públicos para que haya una convivencia armónica entre los distintos actores que forman parte de la vida comunitaria.
