La sesión convocada para las 14 para interpelar al jefe de gabinete, Guillermo Francos, comenzó con críticas de la oposición ante el faltazo (ya anunciado) del ministro de Economía, Luis Caputo, y de Mariano Cúneo Libarona, titular de la cartera de Justicia, quien sí dio una abrupta sorpresa horas antes de iniciarse la jornada parlamentaria. Los diputados se enteraron por la prensa de su ausencia. Luego de dos horas de demora y fuertes debates, finalmente, Francos comenzó con su exposición.
La oposición, entre quienes estaban UxP, la izquierda, la CC, Democracia para Siempre y Encuentro Federal, pidieron votar un cuarto intermedio para ponerle una nueva fecha a una citación de los ministros ausentes. No obstante, querían votarlo en ese momento, para asegurarse de que pasadas las largas horas de exposición de Francos, no perdieran el quórum para votar esa moción.
El oficialismo, con Martín Menem incluido interviniendo en reiteradas ocasiones citando el reglamento, pidió que esa moción se votara al final de la sesión, después de la interpelación a quien sí asistió: Francos. Ante esto, el miedo de la oposición es que si no se votaba de inmediato, al final de la sesión no hubiera quórum para lograrlo.