Tras el lanzamiento de Cristina Kirchner como candidata en las elecciones provinciales del 7 de septiembre en Buenos Aires, se abrió un escenario de debate y negociaciones en el peronismo y La Libertad Avanza. Una encuesta midió la intención de voto de los partidos en la Tercera Sección electoral.
Según CB Consultora Opinión Pública, podrían darse varios escenarios dependiendo de las alianzas que se forman de acá hasta el 9 de julio, que es la fecha límite para la inscripción. El estudio fue realizado entre el 15 y 19 de mayo, antes de la confirmación de la candidatura de Cristina Kirchner.
Con una boleta con todo el espacio peronista unificado, se impone con el 40,4% de los votos frente a la alianza LLA- PRO con el 23,4%.
La Tercera Sección es considerada el bastión peronista por excelencia, por eso se explica que la expresidenta jugará la contienda electoral en un terreno favorable, según los últimos sondeos. Está compuesta por 19 municipios y alcanza a casi cinco millones de votantes. Estos distritos que aportan 18 diputados y 9 senadores, son clave para determinar el siendo clave para determinar el control de la legislatura provincial.
En el caso de un peronismo dividido, el alineado con el kirchnerismo se impondría con el 23,1%, o sea, casi la mitad de los votos que sí compiten unidos. Lo mismo si La Libertad Avanza, se presenta solo con el sello violeta llega a 20,1% y el peronismo cercano a Axel Kicillof quedaría en tercer lugar con 14,9%. El Pro de Mauricio Macri sumaría solo 3,7%, quedando muy por detrás de los primeros rivales.
El macrismo viene de perder una elección clave en su distrito amarillo de la Ciudad de Buenos Aires, donde el candidato de LLA logró quedarse con el primer lugar.
Consultados los peronistas sobre quién quiere que los represente en la Tercera Sección, la ex presidenta duplica a Kicillof como líder del espacio con 33,3% contra el 15,4% del gobernador. Hay un 42,1% que no se pronuncia por ninguno de los dos dirigentes políticos.
En cuanto a si votaría a Cristina Kirchner en las elecciones legislativas, la ex vicepresidenta mantiene un piso electoral del 27,2% pero el techo alcanza el 49,9%. La figura de la presidenta del PJ mantiene un alto rechazo de 42,9%.