Tras el planteo de la mesa de enlace al gobierno por el paso de la motosierra en el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) , ahora se sumaron los gobernadores de las tres principales regiones productivas del país. Recientemente, tanto Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Martín Llaryora (Córdoba) y Axel Kicillof (Buenos Aires) criticaron al Gobierno Nacional.
La semana pasada, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, habló de la estructura del INTA y los cambios que podría haber que alarmó al sector. «El INTA tiene 6.000 personas. Pero, en el año 2003 la planta era de 3000. Entonces, si el INTA es realmente una organización que durante muchos años ha generado servicios para el campo, por lo menos vale hacerse la pregunta si en el 2003 tenían 3000 o 3500 personas por qué hoy necesitan más de 6000 personas y 3000 vehículos”, remarcó.
A su vez habló de Aapresid, la organización de donde provienen tanto el presidente y vicepresidente del organismo, Nicolás Bronzovich y María «Pilu» Giraudo, respectivamente. “Muchos productores que forman parte de Aapresid usan otro sistema, que es el sistema Chacras, donde ellos básicamente financian parte de la investigación y contratan, incluso a veces a gente del INTA, a ingenieros agrónomos para generar una innovación porque el INTA no se las da”, amplió.
“Tenemos que plantearnos la estructura de gobernanza, pero esto no va en contra de nadie, simplemente tiene sentido evaluar qué es lo que está haciendo el INTA y tratar de mejorarlo. De esto se trata“, agregó el funcionario.
Ante esto, la mesa de enlace solicitó una reunión con el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, y los titulares del INTA. Allí, los dirigentes agropecuarios coincidieron en que son necesarias algunas modificaciones para construir un instituto más eficiente y moderno. Sin embargo, se mantuvo firme en tres reclamos fundamentales al gobierno nacional: que mantenga su autarquía; su gobernanza y su estructura de Centros Regionales, «ya que se trata de una herramienta imprescindible para el desarrollo agropecuario”.
Ahora, el que se sumó al reclamo fue el gobernador Llaryora. «Al INTA hay que fortalecerlo, no ensuciarlo para vaciarlo. Quienes toman decisiones deberían venir al interior, recorrer nuestros campos y escuchar a los productores, quienes trabajan de sol a sol a pesar de las malditas retenciones. Desde el Obelisco, y sin diálogo, es imposible comprender la realidad de nuestra gente de campo», dijo Llaryora.
«Además de los más de 3.500 millones de dólares que el Estado nacional se lleva cada año de #Córdoba por las retenciones, ¿también quieren destruir nuestro talento?», disparó.
Según Llaryora, al INTA hay que «modernizarlo, impulsar alianzas estratégicas con el sector privado y fortalecer su vínculo con el entramado productivo, científico y académico». «Cerrar el INTA sería cerrar otra puerta al #progreso y a la innovación que el país necesita», agregó.
Para el gobernador de Córdoba, defender al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria es defender al campo argentino. «Allí abundan el talento, la vocación y la experiencia; por eso reivindico la calidad profesional de cada una y cada uno de sus trabajadores, quienes todos los días aportan al desarrollo nacional.
«El INTA no sólo está presente en el campo: está en cada casa, en cada mesa y en cada alimento producido con tecnología, innovación y trabajo. Por eso debemos preservar su autonomía y su gobernanza, pensando en los nuevos desafíos del desarrollo y el crecimiento de esta institución señera», remarcó.
En la apertura formal de Agroactiva realizada el jueves pasado, el gobernador Pullaro también había respaldado la labor del INTA, en presencia del jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos.
“En este momento del país tenemos un debate, que es el debate del INTA. Un organismo que tenemos que cuidar y pedimos que así lo haga el Gobierno Nacional. El INTA es federalismo, el INTA es ciencia, el INTA es tecnología”, reflexionó desde el escenario.
Previo, también había coincidido con los reclamos de la mesa de enlace. «El campo crece a través del desarrollo científico y la investigación. Lo que plantean (los dirigentes rurales) no son demandas sectoriales, son propuestas que piensan en una Argentina productiva”.
Por su parte, el gobernador bonaerense Kicillof había afirmado que “es un crimen que lo quieran cerrar. No se puede explicar, no se entiende”.
En este sentido, apuntó que “da mucha bronca el desmantelamiento». «El INTA tiene un papel importante en términos de dar servicios a productores, que nunca podría dar un privado”, dijo Kicillof.
“Desde el Ministerio de Desarrollo Agrario tenemos nuestras chacras experimentales y todo nuestro trabajo, pero el INTA ha traído mejoras genéticas y última tecnología. Todo esto sumado a la ayuda permanente en lo que hace a lo productivo, lo social, lo humano, a lo que es vivir en un territorio tan extenso, con tanta riqueza, pero que necesita inversión, mano de obra y Estado”, agregó.