Un hombre quiso “coimear” a un agente de tránsito en el marco de un control de alcoholemia, pero terminó escapando y dejando su auto abandonado con su amigo dentro, en un insólito hecho que tuvo lugar en las últimas horas.
Todo sucedió en la madrugada del último viernes, precisamente en el kilómetro 20 de la Ruta Nacional 50 en la provincia de Salta. Allí, un conductor fue detenido para llevar adelante el proceso que mide la cantidad de alcohol en la sangre de una persona a través del análisis del aire exhalado.
El hombre —oriundo de la provincia de Mendoza— al saber que estaría en problemas por haber consumido alcohol y salir a la ruta manejando, intentó sobornar al agente de tránsito ofreciéndole la suma de $10.000 para evitar el control de alcoholemia.
«Estuve tomando en Pichanal, no me cagues la vida», fue uno de los dichos del infractor que trascendieron, según confirmaron testimonios de testigos a la prensa local.
Sin embargo, al ver frustrado su plan, el conductor llegó a mostrar su licencia, pero aprovechó la distracción del agente para escapar a toda velocidad.
El vehículo fue abandonado en la ciudad de Orán. Lo particular del caso es que el acompañante quedó solo dentro del auto, ya que el infractor se dio a la fuga.
Pese a haberse fugado, horas más tarde se presentó a una comisaría cercana y fue demorado. Allí le retuvieron la licencia de conducir y al infractor se le labró un acta con antecedentes por cohecho y resistencia a la autoridad.
Cabe destacar que en Salta no se aplica el criterio de conductor alternativo en caso de alcoholemia positiva, y una multa puede ir de los $150.000 en adelante. En la provincia rige desde el 2014 la Ley 7.846 de Tolerancia Cero.
Vale recordar que el alcohol es un estupefaciente que incrementa el riesgo de protagonizar siniestros viales con lesiones personales o a terceros, hasta incluso un desenlace fatal.
