La Asociación bancaria dispuso un plan de lucha ante lo que considera que son actos de avasallamientos contra los trabajadores por parte del Banco Santander.
La entidad bancaria ha caído en la calidad de su servicio a los clientes y muestra un clima tenso debido a que el manoseo a sus empleados se refleja en el servicio que deben prestar.
La Bancaria denuncia que hubo achiques, despidos y cercenamiento de derechos en contra de los trabajadores del banco.
Desde el gremio resaltan que mientras desde España Ana Botín se refiere a la reconversión laboral buscando el progreso de las personas para lograr que se reciclen laboralmente para que puedan seguir contribuyendo como lo vienen haciendo, en nuestro país ocurre lo contrario.
Las denuncias también dan cuenta que a muchos empleados se los aprieta para que firmen desvinculaciones o los despiden sin causa. La violencia laboral es inaceptable.
La Bancaria se movilizó en Buenos Aires la semana pasada para reclamar por esta situación. Por eso y hasta que reciban las respuestas esperadas se declararon en «Estado de Alerta y Movilización».