Tras una campaña intensa en territorio bonaerense, la elección legislativa en la provincia de Buenos Aires arrancó con algunas complicaciones: varias mesas del conurbano abrieron tarde por falta de autoridades. El gobernador Axel Kicillof aseguró que el problema quedó resuelto pasadas las 10 de la mañana. Para entonces, ya se habían registrado varias perlitas de la jornada.
En el Instituto Pedro Poveda, en Vicente López, donde vota la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, un autobomba se detuvo en la puerta y generó sorpresa entre los presentes. No se trataba de una emergencia, sino de un bombero que había llegado para emitir su voto.
“Vine a votar”, dijo. “En total somos 10 y nos tenemos que dividir: la mitad está acá y la otra mitad en el cuartel. Hoy está todo tranquilo”, explicó sobre la jornada en su distrito.
En la puerta de la misma institución educativa, apareció una intervención con birome en el padrón de electores exhibido en el ingreso, donde cada votante puede corroborar su inscripción. Allí, se dejó escrito “3%” al lado del nombre de la hermana del Presidente.
Se trata del porcentaje que, según grabaciones clandestinas con signos de edición, Karina Milei habría recibido en el marco de una presunta maniobra de corrupción. En esos audios, Diego Spagnuolo -ahora exdirector de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis)- le cuenta a un interlocutor no identificado que el organismo estaría siendo “desfalcado”.
En la grabación, la voz atribuida a Spagnuolo apunta a Eduardo “Lule” Menem, mano derecha de Karina, como el responsable de organizar un supuesto sistema de retornos en la compra de medicamentos. “Son más chorros que los Kirchner”, se escucha decir, al explicar que a las empresas se les exigiría un 8% en coimas, cuando antes el porcentaje era del 5%.