Familiares y amigos de Federico Toledo se concentraron este lunes en la Plaza Independencia para reclamar justicia. El joven de 22 años murió el sábado a la salida de un boliche en calle Sarmiento al 1200, tras recibir un golpe de puño. En la movilización hablaron allegados que estuvieron esa madrugada y también adultos cercanos a la familia, con mensajes cargados de dolor y bronca.
La madrugada del sábado se tiñó de tragedia en pleno centro tucumano. A la salida del local nocturno, Toledo cayó al suelo tras ser golpeado y perdió la vida en el acto. Por el hecho fue detenido Santiago Budini, de 21 años, quien quedó imputado por homicidio simple y permanece bajo prisión preventiva mientras avanza la investigación.
Facundo Millán, uno de los presentes aquella madrugada, reconstruyó lo sucedido:
“Estábamos todos juntos esperando para irnos cuando Santiago Budini le pegó primero a Mateo y le rompió la nariz. Fede estaba quieto, no estaba peleando ni insultando. Ahí fue que Santiago le metió la piña directo y lo tiró al piso. No se defendió, no intentó separarse, nada”.
Por su parte, Agustín Risso Patrón agregó:
“Fede cayó y ya no reaccionó. No movió los brazos, no intentó levantarse. Nosotros al principio pensamos que iba a poder pararse, pero enseguida vimos que estaba muy mal. Lo más doloroso es que él no había hecho nada. Y lo único que pedimos ahora es justicia: que reciba la condena más larga posible, porque ya tenía antecedentes de violencia”.
Según contaron en la concentración, Budini no solo tiene denuncias por violencia de género sino también otros episodios de agresiones físicas. “Había golpeado a otro chico y lo dejó convulsionando, pero siempre se salvaba porque el padre es policía”, aseguraron.
En la plaza también se escuchó un pedido más duro. Andrea Guzmán, tía de Agustín Risso Patrón, habló en representación de la familia de Federico y reclamó que el acusado cumpla condena en una cárcel común.
