La intendenta Rossana Chahla anunció que el municipio pondrá en marcha un sistema de traslado gratuito para niños y jóvenes con tartamudez, con el objetivo de que no abandonen sus terapias por falta de recursos.
“Nos interesa que estos chicos no falten, porque la continuidad es clave. Muchas veces los padres no tienen ni para el boleto. Por eso decidimos comprar un vehículo exclusivo o cubrir el costo del transporte para que puedan seguir viniendo”, explicó.
El centro municipal especializado en disfluencia, que abrió hace apenas cinco meses, ya atendió a más de 220 pacientes y también funciona como espacio de contención para las familias. “Hay una escuela de padres donde se cuentan cómo mejoran, se acompañan. Eso acorta los tiempos y los miedos”, contó Chahla.
La intendenta habló además sobre lo poco que se visibiliza esta problemática: “Es algo que muchas veces se esconde. Muchos chicos sufren bullying por tartamudear, y en algunos casos termina en situaciones muy dolorosas. Por eso es importante detectarlo a tiempo”.
El nuevo servicio busca complementar el sistema de salud provincial, con terapias que requieren tiempo, paciencia y seguimiento. “El sistema público está saturado con urgencias y emergencias. Esto necesita otro ritmo, otro espacio”, dijo.
Durante la actividad, Chahla mencionó el ejemplo de Wado de Pedro, quien hizo pública su experiencia con la tartamudez: “Historias como la de él ayudan a que las familias pierdan la vergüenza y busquen ayuda. Las madres no se rinden: golpean todas las puertas, y ahora el municipio también les abre una”, cerró.
