Una tarjeta American Express es ahora una prueba clave para determinar la ruta del dinero negro que financia al monotributista Luciano Pantano para poder mantener la mansión de Villa Rosa, dos casas en el countrie Ayres de Pilar, 54 autos de alta gama y de colección y más de medio centenar de caballos de salto y otras razas exóticas. La Justicia quiere saber dónde está fondeada la tarjeta.
La tarjeta de crédito fue usada por Pantano para pagar los seguros de los autos secuestrados en el garage de la mansión atribuida al Tesorero de la AFA, Pablo Toviggino, según los informes de más de 2 mil páginas recibidas esta semana por el juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky.La mansión de Pilar figura aun como lote baldío.
Por lo pronto el Registro de la Propiedad Automotor informó que las cédulas verdes de los 54 autos, inclusive los Porsche, están a nombre de la empresa Real Central que dirige Pantano y es parte de una trama de sociedades anónimas que se venden acciones entre sí y que en alguna etapa participó Toviggino.
Los tres tarjetas azules para poder manejar los Porsche que están a nombre del hijo del dirigente del fútbol de Santiago del Estero fueron dadas de baja antes que estallara el escándalo. Por esta razón, el magistrado pidió los informes completos de cada uno de los autos, informaron fuentes judiciales. Mora así presentaría a sus clientes el martes antes de Navidad.
De todos modos, el juez viene dispuesto a habilitar la feria y trabajar todo enero en esta megacausa. Todo si antes, la Cámara en lo Penal Económica no le quita la causa y la manda al juez federal de Zárate-Campana por una cuestión jurisdiccional.
Si bien Pantano presentaría en los próximos días un descargo por escrito de la mano de su abogado Martín Mora, la investigación sigue la ruta de la plata negra. Si no explican su patrimonio con sus respuestas, serán llamados a declaración indagatoria como sospechosos.
Por un lado, se descubrió que el monotribuista y ex presidente de la liga Futsal paga las expensas en efectivo las tasas municipales y las abona con Mercado Pago. En el juzgado ya se recibieron los primeros informes de quiénes ingresaron a esas dos casas y a partir del lunes se empezará a cruzar datos. En los pasillos de tribunales se habla de políticos y algún juez.
Por otro, en la causa aparecen datos de que Pantano y su madre Ana Lucía Conte -que también aparece como “dueña” de Real Central- mueve mucho efectivo. “Una persona puede comprar una casa pero mantenerla es un gasto fijo mensual más duro para un monotributista”, comentó la fuente.
Aguinsky delineó una estrategia de investigación por partes. En esta primera etapa, quiere saber todos los gastos y propiedades inmuebles, autos y viajes que hizo Pantano. Este y su madre están acusados de evasión impositiva y lavado de dinero. Pero para fundar el segundo delito le hace falta el delito precedente: es decir si plata proviene del juego clandestino, de coimas en la AFA u otra hipótesis.
Por lo pronto, el abogado de Pantano en una improvisada conferencia de prensa el día del allanamiento a la mansión dijo que su cliente había ingresado 1,8 millones de dólares en el blanqueo del ex presidente Alberto Fernández.
De todos modos, a Pantano “no le da el blanco” para la compra de la mansión, las dos casas, los autos, las obras de arte y los caballos. En tribunales se comenta que aparecería en las próximas semanas en el juzgado un testigo que denunciará el envío de plata “en valijas” para todos estos gastos.
Al dirigente de la Coalición Cívica de Pilar Matias Yofe, con el apoyo de Elisa Carrió, le llamó la atención que es “la misma cifra” que figura en la escritura en que la empresa Soma de Mauro Paz -otro dirigente de la AFA- dice que le vendió la mansión a Central Real de Pantano. Para colmo, la mansión , con sauna, casino, pileta y helipuerto, figura como baldío en la municipalidad de Pilar que dirige Federico Achaval, vinculado al kirchnerismo, destacó Yofe el primer denunciante de este caso.
