El Índice Nacional de Precios al Consumidor de Brasil registró en septiembre un retroceso mensual del 0,29%, siendo el tercer mes consecutivo en el que los precios se contraen en la mayor economía latinoamericana, según datos publicados por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (Ibge).
Con el dato de septiembre, el dato acumulado de inflación del 2022 asciende hasta un 4,09%, mientras que en los últimos 12 meses el registro se impulsa hasta un 7,17%, por debajo del 8,73% observado en los 12 meses inmediatamente anteriores.
De los nueve grupos de productos y servicios analizados por el instituto de estadística, cuatro redujeron sus precios durante el noveno mes del año. Así, el grupo de transporte se anotó una caída del 1,98%, inferior a la acontecida durante agosto (-3,37%). A esta le siguieron comunicación (-2,08%) y alimentos y bebidas (-0,51%).
De su lado, el grupo de artículos para el hogar, que registró una subida del 0,42% en agosto, se anotó una caída del 0,13% en septiembre. En la parte de las subidas destacaron los grupos de vestuario (1,77%) y gastos personales (0,95%). El resto de grupos ha registrado incrementos de entre el 0,12% en educación y el 0,6% de vivienda.
El Ibge destaca en estos datos la tercera caída consecutiva de los precios en el transporte. Como en meses anteriores, el resultado fue consecuencia de la reducción en los precios de los combustibles, especialmente de la gasolina, que se abarató un 8,33%.
A nivel geográfico, solo una de las 16 regiones analizadas tuvo una variación positiva. Esta fue Vitória, con una inflación del 0,17% impulsada por las variaciones en las tarifas de agua y alcantarillado y de electricidad. La mayor caída, por su parte, se observó en la Región Metropolitana de Fortaleza (-0,65%).