Las cámaras empresarias quieren ponerle un freno a la demanda paritaria de la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros que comanda Pablo Moyano. Transcurrió la segunda audiencia de negociación en la sede del Ministerio de Trabajo de Callao al 100 sin acuerdo por lo que las partes volverán a verse las caras en una semana y luego de un nuevo cuarto intermedio.
No obstante, la carta que juegan sobre la mesa no tiene que ver con el número de mayor impacto mediático -ese 131% de aumento anualizado que los choferes de camión esperan conseguir bajo amenaza de conflicto y que los empresarios ya califican de «excesivo»- sino con otros ítems que están en juego. En particular los que refieren a cambios en el convenio colectivo que rige la actividad.
Con miras a fijar un nuevo techo en las paritarias 2022, la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros que lideran Hugo y Pablo Moyano se presentó el miércoles pasado en el Ministerio de Trabajo para solicitar que se reabra la paritaria en el sector. Dato curioso, la negociación más ambiciosas del año se da en el marco de la salida del actual titular de la cartera, Claudio Moroni, y en la antesala del desembarco de Raquel ‘Kelly’ Olmos quien ya inició su transición.
A las cámaras empresarias que forman parte de la paritaria, por supuesto, el número de 100% extra que pide Pablo Moyano les resultó chocante. «Es una barbaridad», refutó uno de los participantes de la mesa chica de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), que nuclea a cámaras y asociaciones de todo el país.
«Nuestros ajustes van de junio a julio, por año cortado, no calendario, y lo venimos haciendo en base a la inflación. Por supuesto que hay que ajustar nuevamente pero tenemos otros problemas también a considerar», añadió. Una versión indicó que la contraoferta de los empresarios rondó el 81%, veinte puntos menos de lo solicitado por Moyano y cincuenta en total si se toma la proyección anualizada. Desde Fadeeac insisten que los porcentajes son conversables, no es el nudo de la negociación.
En rigor, el número dos de los camioneros habló de un 100% que complementaría el 31% negociado en abril y ya cobrado en su totalidad –el último tramo del 16% se incorporó en septiembre a los salarios– para alcanzar un monto muy por encima de la inflación que hoy se proyecta para 2022, en torno al 100%.
Acorde a la propuesta de Moyano significaría una recomposición a cobrar desde noviembre y por los próximos seis meses con lo cual, calculan, el salario irá empardando con sus tramos la escalada de la inflación salvo que se logre frenar la inercia que lo mueve. El miércoles pasado, los empresarios se limitaron a tomar nota y la negociación pasó a un cuarto intermedio que se retomará hoy.
Si bien no es un número que festejen desde las cámaras, explican que su objetivo es «cuidar el salario» pero remarcan, nuevamente, que no es el ítem de su mayor preocupación.