Juan Grabois dijo que el gobierno de Alberto Fernández es un «fracaso absoluto» y no descartó ir por la presidencia el año próximo en el caso de que en el Frente de Todos se impusiera «un candidato de centro» como Sergio Massa que se limitara a «la administración de lo existente» y que piense que «está bien el acuerdo con el FMI y el extractivismo». Sostuvo que se postularía «para que no se diluya una militancia que se plantea algo mejor que la administración de lo existente, que es Massa».
El dirigente social definió a Alberto Fernández como «un fraude que le está poniendo la alfombra roja a la derecha para llegar a la Casa Rosada». «Para nosotros es un fracaso absoluto, no cumplió el contrato electoral por el cual muchos lo apoyamos, que era empezar por los últimos. Los últimos están peor que hace tres años, ese es un dato objetivo de la realidad. Lo peor es que la Argentina creció en PBI, lo cual quiere decir que no es un problema de crecimiento, sino de distribución», enfatizó.
«Y un gobierno popular debería tener como bandera la distribución de la riqueza. Entonces para mí, fue un fraude, es un fraude. Alberto Fernández traicionó la confianza que depositamos en él y le está poniendo la alfombra roja a la derecha para llegar a la Casa Rosada», lanzó. En tanto, consideró que la vicepresidenta Cristina Kirchner no debería volver a ser candidata presidencial, y que en lugar de ello tendría que centrar sus esfuerzos en realizar un «trasvasamiento (sic) generacional».
«Cristina tiene una gran experiencia y tiene que lograr algo que no logró ningún líder latinoamericano y no logró el general Perón, que es hacer el ´trasvasamiento´ generacional: es decir, poner todo lo bueno que ella tiene en una nueva generación, que no reciba lo malo y que tenga autonomía, que pueda tener pensamiento crítico propio», opinó.
De todos modos, aclaró que si ella decidiera ser la candidata, desde el Frente Patria Grande la apoyarían. «Si ella es candidata, la vamos a apoyar, no porque sea perfecta. De hecho tengo una diferencia ideológica de base con Cristina. Cristina habla del desarrollo de un capitalismo en serio y nosotros creemos en la necesidad de un sistema alternativo que no tiene nombre, donde el centro no sea el capital, sino el ser humano y la naturaleza», diferenció.
Si bien valoró la figura de la ex presidenta, Grabois identificó cuál es a su entender su punto más débil: «Valoro mucho a Cristina como estadista, pero sus mayores errores fueron la gente que eligió. Eligió mal: se confundió con Alberto, se confundió en poner a Massa, se confundió en el armado de las elecciones de 2015. Ella tiene carisma, pero a la hora de ungir, creo que opera algún mecanismo en el que termina ungiendo incluso a gente que se portó mal con ella. Es raro ese mecanismo», indicó.
«Si hubiera un candidato ‘de centro’, que piensa que está bien el acuerdo con el FMI, que piense que está bien el extractivismo, que trate todo el tiempo de quedar bien con el sector empresario, que no tenga conocimiento ni priorice las políticas de Tierra, Techo y Trabajo, dentro de una interna del Frente de Todos, podría serlo, con el único objeto de que exista una opción para los que tenemos un planteo alternativo», admitió el líder del Frente Patria Grande.
«Pero es algo que yo no tengo claro, que tengo que hablar mucho con mis compañeros y reflexionar mucho también si eso es útil o no. La razón para hacerlo es un bien mayor. Ese sería un escenario posible, no probable, pero posible», reconoció en una entrevista.
Acerca del ministro de Economía, Grabois aseguró que le «mintió dos veces: dos veces incumplió sus compromisos con los sectores sociales». «Una cuando era intendente y otra cuando estaba discutiendo lo del bono. Pero lo perdonamos y esperamos que la tercera sea la vencida», cedió.
Sobre su programa económico, lo caracterizó como «un ajuste light», y señaló que lo que más le preocupa de Massa «es que su amistad con Gerardo Morales y un grupo empresario implique el embargo de los recursos estratégicos de la Argentina, como el litio y los minerales raros, los hidrocarburos y el sector agroalimentario, que es lo único que les importa a los poderes extranjeros de nuestro país».