El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, recibió nuevas amenazas de muerte en medio de la creciente tensión por al violencia ligada al narcotráfico que ya se cobró cuatro víctimas en Rosario. La nota fue encontrada en la mañana del martes en el marco de la coordinación de esfuerzos entre el gobierno nacional y provincial para dar respuesta a lo que califican como «narcoterrorismo».
«Hasta que Pullaro no pare, vamos a matar. Zona norte sur oeste. El que avisa no traiciona», reza el mensaje que fue entregado a las autoridades policiales por una vecina del lugar y que permanece bajo investigación.
El hallazgo se dio un día después de la visita de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y de su par de Defensa, Luis Petri. También coincidió con las repercusiones de la violencia a nivel nacional, que no solo motivó al presidente Javier Milei a seguir de cerca el monitoreo de los operativos en Rosario, sino que hasta la Corte Suprema adelantó que impulsará la conformación de una Agencia Nacional contra el Narcotráfico.
La nota amenazante fue encontrada en una casa ubicada en la calle Cayetano Silva al 1200, cerca del policlínico PAMI 2 de la ciudad de Rosario. A modo de firma, hay un dibujo que aparenta ser un parlante tachado que, según precisan investigadores, es el símbolo que usan los hinchas de Newell’s para diferenciarse de Rosario Central.
Mientras se investiga el hecho, en la madrugada del martes los recolectores de residuos denunciaron que fueron amenazados en el cruce de las calles Mendoza y Circunvalación, cerca de la estación de servicio Puma donde fue asesinado el playero Bruno Bussanich, la más reciente víctima de la violencia narco en la ciudad.
Según el relato de los trabajadores de la empresa LimpiAR, estaban cumpliendo con sus tareas de recolección cuando fueron interceptados por dos personas a bordo de un auto. Sin disminuir la marcha, los sospechosos hicieron el gesto de apuntarles con un arma.
La situación cobró otra gravedad en el difícil contexto que atraviesa la ciudad que ya se vio paralizada tras el paro de transporte que siguió al asesinato de dos colectiveros la semana pasada. Por tanto, los implicados dieron aviso al 911, mientras que todavía el Sindicato de Recolectores de Residuos de Rosario todavía no se pronunció respecto a alguna medida de fuerza.
Desde que asumió a fines del año pasado, el gobernador de Santa Fe inició una serie de controles en las cárceles que enardecieron a las bandas criminales, que se unieron para amedrentar al estado provincial. Por este motivo, Pullaro recibió amenazas en reiteradas ocasiones, al igual que aquellas que fueron dirigidas hacia su familia y el ministro de Seguridad provincial, Pablo Cococcioni.
La última amenaza que recibió fue en el marco del crimen de Bruno Bussanich, un trabajador de una estación de servicio que fue asesinado por un sicario para enviarle un mensaje al gobernador. Fue la última víctima de la violencia del narcotráfico en Rosario por la que murieron dos taxistas y un colectivero.
Pero antes hubo otras intimidaciones, como aquella del 8 de enero cuando fue forzado a mudarse de Rosario junto a su familia. Lo hizo por las graves amenazas que recibió después de que implementara la restitución de los pabellones de alto perfil para jefes narcos y sicarios en la Unidad Penitenciaria 11 de Piñero, además de la prohibición del ingreso de familiares con alimentos.
«Seguiremos manteniendo controlados a los detenidos que cometían delitos desde las cárceles, alojados en pabellones de alto perfil. Eso es lo que más molesta. Y avanzaremos para bajar los niveles de violencia y aumentar la seguridad en la ciudad», aseguró el gobernador santafesino en aquel entonces.
El presidente Javier Milei encabezó este martes una nueva reunión de Gabinete en la que monitoreó la coyuntura en la ciudad de Rosario, mientras se analizaba el envío de una nueva Ley de Seguridad Interior en el Congreso para poder dar intervención a las Fuerzas Armadas en la lucha contra el narcotráfico.
«Lo vamos a mandar. Es algo que discutimos hoy en la reunión de Gabinete. Petri estaba con la ley, pero Patricia estaba en el avión de vuelta, pero es imprudente tomar una decisión final», planteó el Presidente después de la reunión de gabinete de este martes. La «imprudencia» que mencionó fue en referencia a la ausencia de Bullrich, que fue a Rosario a presentar 450 nuevos efectivos de las fuerzas federales.
La intención del gobierno nacional es que las Fuerzas Armadas puedan tener atribuciones «adicionales», hoy limitadas por la ley actual que en su artículo 27 solo las autoriza a la afectación de «sus servicios de arsenales, intendencia, sanidad, veterinaria, construcciones y transporte, así como de elementos de ingenieros y comunicaciones»
