Kate Middleton confirmó hace algunas semanas que atraviesa un duro momento y que padece cáncer.
La princesa de Gales se había sometido a una cirugía abdominal a finales de diciembre y su salud fue una verdadera incógnita hasta que ella misma decidió romper el silencio.
Pero aunque se desconoce cuál es el tipo de cáncer que padece Kate Middleton, salió a la luz que la esposa de Guillermo sufrió de una condición que le complicó sus tres embarazos: hiperémesis gravídica.
La hiperémesis gravídica es una condición médica que afecta a algunas mujeres embarazadas y se caracteriza por náuseas y vómitos persistentes y severos durante el embarazo. A diferencia de las náuseas matutinas comunes, que son más leves y suelen desaparecer después del primer trimestre, la hiperémesis gravídica puede persistir durante todo el embarazo e incluso requerir tratamiento médico.
Esta condición de Kate Middleton puede causar deshidratación, pérdida de peso significativa y desequilibrios electrolíticos, lo que puede poner en riesgo tanto la salud de la madre como la del feto. Las mujeres que experimentan hiperémesis gravídica pueden necesitar ser hospitalizadas para recibir líquidos intravenosos y medicamentos para controlar los síntomas.
