El Gobierno volverá a armar hoy la mesa de diálogo que abrió hace unas semanas con sectores de la oposición alineados con su política. Recibirá a una delegación de diputados de PRO, con la novedad de la presencia de un grupo de radicales encabezado por el titular del bloque, el cordobés Rodrigo de Loredo, y con algunos integrantes de ese partido en la Comisión de Presupuesto y Hacienda en la Cámara Baja, como el mendocino Lisandro Nieri y también del MID.
Este tipo de reuniones para avanzar con la estrategia legislativa en Diputados, donde La Libertad Avanza no tiene la fuerza propia suficiente ya que cuenta con un bloque en el Parlamento de apenas 39 legisladores, se venían realizando los lunes, pero en esta ocasión se pasó para el miércoles.
Justamente la discusión del Presupuesto que el Gobierno envió el 15 de septiembre es uno de los temas en los que se intenta avanzar. Cerca del Presidente están confiados en que conseguirán los votos necesarios que les permita contar con esa herramienta en 2025, luego de que en este período se acordara con la gestión de Alberto Fernández prorrogar para este ejercicio el vigente en 2023.
En los últimos días, varios funcionarios -el viceministro de Economía, José Luis Daza, y el secretario de Turismo y Deportes, Daniel Scioli, por ejemplo- concurrieron a la Comisión que lidera José Luis Espert en el Congreso para justificar la postura oficial.
Quienes estuvieron en duda para la reunión fueron los representantes del MID, Oscar Zago, Eduardo Falcone y María Cecilia Ibáñez. Los tres estuvieron el martes en Entre Ríos con Rogelio Frigerio. En ese bloque, que suele acompañar a LLA en cada votación, generó ruido la iniciativa que se presentó en la Legislatura de Buenos Aires para que se discuta y se sancione una Ley Bases en la Ciudad de Buenos Aires, con la intención de que se avance en privatizaciones y achicamiento del Estado, dentro del distrito que gobierna Jorge Macri.
La última vez que Francos recibió a los diputados enrolados en los sectores dialoguistas fue el 14 de octubre, cuando estuvo acompañado por otros funcionarios como el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y el vicejefe de Gabinete, José Rolandi.
Allí se decidió con el apoyo del PRO, con Cristian Ritondo a la cabeza, impulsar en conjunto la llamada ley Hojarasca y el Presupuesto, pero también avanzar con una reglamentación que habilitase a la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) con el objetivo de auditar los fondos destinados a las universidades nacionales. En ese último cónclave se incorporó a las deliberaciones el asesor presidencial Santiago Caputo, respondiendo a una solicitud de la fuerza que preside Mauricio Macri.
Las autoridades de PRO, a partir de la poca comunicación entre las partes de las medidas que se toman y una supuesta falta de resultados en la coordinación legislativa, habían insistido en la necesidad de que una de las personas de mayor confianza de Javier Milei se sumara. Y el asesor presidencial accedió al pedido.
“Nosotros no pedimos participar de las decisiones del Gobierno, nosotros lo que planteamos desde un principio es que en las resoluciones que se tomen y que después vayan al Parlamento, sí estemos sentado en esa mesa, porque después tenemos voz y voto para ese tipo de cosas y es requerido el PRO. Entonces, lo que pedimos es que para ese tipo de cosas nosotros estemos en la decisión política”, explicó Ritondo después de ese encuentro.
En esta ocasión, por el oficialismo liderarán la mesa el secretario del Interior, Lisandro Catalán, y el ministro Sturzenegger, además de Santiago Caputo. También estarán este mediodía los diputados del partido gobernante, encabezados por Gabriel Bornoroni y Santiago Santurio.