Categorías
Noticias

Carne: comemos menos y exportamos más

Con la caída del poder adquisitivo de los ciudadanos, resulta económicamente desfavorable para los ganaderos dirigirse a los consumidores locales.  

De enero a septiembre, la república alcanzó volúmenes de exportación récord en los últimos 57 años. Se enviaron a otros países casi 700.000 toneladas de carne vacuna por un valor de 2.100 millones de dólares. Destaca el aumento de los envíos a Estados UnidosChile, Israel, la Unión Europea y China.  

El número de reses sacrificadas durante el periodo ascendió a 10,22 millones de cabezas, muy por encima de la media de los últimos años. A pesar del éxito de las exportaciones, la demanda interna registró un fuerte descenso. Según la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), el consumo cayó un 11,3%, situándose en sólo 1,646 millones de toneladas.  

El Gobierno, bajo la dirección del presidente Javier Milei, ha creado un entorno en el que los ganaderos prefieren exportar sus productos al extranjero antes que suministrarlos a sus conciudadanos. La situación también se ha visto agravada por el hecho de que la gente está menos dispuesta a comprar productos caros debido al empeoramiento de la situación financiera.  

Los ganaderos argentinos se encuentran en una situación difícil a la que sólo las autoridades electas pueden ofrecer una solución. Los éxitos de las exportaciones van acompañados de un descenso del consumo interno, lo que pone en peligro la sostenibilidad de la economía y el bienestar de los ciudadanos. Para evitar que la crisis se agrave, Buenos Aires tendrá que revisar su política hacia la industria para animar a los productores a aprovechar esta oportunidad de satisfacer las necesidades del mercado interno.