Carlos es el séptimo de nueve hermanos, vive en una casa humilde en la ciudad de Corrientes y publicó un aviso de búsqueda de trabajo que se volvió viral: limpia autos a domicilio para poder pagar sus estudios.
“Hola, estoy lavando autos a domicilio. Cobro $500 por auto, camioneta $700 y moto $350. Únicamente con manguera. Aviso: no tengo aspiradora y limpio como puedo. Por dentro lo dejo muy bien. Si deseás lavar tu auto con alguien de confianza, aquí estoy”, escribió el joven, que tiene 18 años y un sueño: convertirse en oficial de Prefectura.
“Se me ocurrió esta idea para juntar plata para poder estudiar. No puedo estar en casa sin hacer nada. Me inscribí en la Escuela de Oficiales, viajé a Buenos Aires para los exámenes médicos y todo me demandó 23 mil pesos. Todavía no me confirmaron si voy a poder ingresar ahora, pero necesito trabajar para reunir los recursos”, expresó..
Antes de largarse solo hace dos meses, Carlos ya había sumado experiencia trabajando en un lavadero. “Fue hace un tiempito, acá en la ciudad. Me pagaban muy, muy poco luego de estar todo el día. Los días de muchísimo calor ni siquiera nos daban un poco de agua o hielo”, recuerda. Y sigue: “El trabajo me gustaba y me salía fácil. Entonces pensaba: ‘¿por qué estoy perdiendo el tiempo acá si puedo hacer esto por mi cuenta?’. Y así empezó.
Limpia autos para pagar sus estudios: “Después que publiqué el aviso, me llamó bastante gente”
La difusión que tuvo el aviso le sirvió a Carlos para conseguir nuevos clientes. “Me llamó bastante gente. Hay personas que son solidarias, que ven por qué hago esto y quieren ayudar. Además, les gusta que el servicio sea a domicilio, sin tener que salir de sus casas”. Y avisa que las distancias no son impedimento si se trata de trabajar: “Puedo viajar a Chaco, incluso. Si me pagan el viaje, no tengo ningún problema”.
Carlos es hincha de River y admirador del músico Paulo Londra, pero reconoce tener un “hobby” no convencional que revela parte de su personalidad: “A mí me gusta trabajar. Si estoy en mi casa, por ejemplo, me encanta hacer cosas. Ayudar a mi mamá a limpiar, por ejemplo. “Como te decía, no me gusta estar quieto. También hago trabajos de pintura y jardinería. Podo árboles”.
El joven insiste en que su ilusión es “ingresar a la Fuerza”, pero en su horizonte hay otros planes por si se demora: “También me gustan las carreras de kinesiología y traumatología. Esa rama de la salud me interesa mucho”.