Con el objetivo de acompañar a las personas que se encuentran en una situación económica vulnerable, el Gobierno de la Nación impulsará un nuevo IFE (Ingreso Familiar de Emergencia) para dos millones de personas.
El bono no es para todas las familias, sino que está destinado exclusivamente para las personas que no reciban ningún plan o programa social.
El nuevo IFE se financiará con el mayor ingreso fiscal por retenciones a la soja y se otorgará a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES).
El ministro de Economía, Sergio Massa, planificó el refuerzo a través del Decreto de Necesidad y Urgencia 576/2022 con el que oficializó el «dólar soja».
A través de estas medidas económicas, el objetivo principal es poder balancear los ingresos con la inflación creciente.
Además, se mantuvo firme con respecto a la política de sostener el ingreso de dólares y el orden fiscal cómo formas para reducir la incertidumbre y la volatilidad cambiaria.
Como se mencionó anteriormente, el bono será para personas en situación de indign se financiaría con el dinero extra que ingresa por las retenciones a la mayor liquidación de la cosecha de soja.
Actualmente, antes de que el nuevo IFE o bono de refuerzo entre en vigencia, se encuentra disponible el extra para los jubilados y pensionados que perciben el haber mínimo, el cual tiene un valor de $ 7000, pero irá decreciendo hasta $ 4000, dependiendo de los ingresos de cada titular.
La medida fue anunciada por Massa y por la directora de ANSES, Fernanda Raverta, a mediados de agosto, para que ningún beneficiario cobre menos de $ 50.000 por mes.
El bono para jubilados y pensionados se pagará a lo largo de septiembre, octubre y noviembre, debido a que en diciembre se activará el último aumento del año por la Ley de Movilidad Jubilatoria. Los titulares también fueron impactados por la suba del 15,53% en septiembre.
